El Gobierno estadounidense apuntó que Blinken abordará “la importancia de mantener abiertas las líneas de comunicación”.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, viajará este viernes a China donde se reunirá con altos funcionarios del Gobierno en medio de un contexto matizado por el aumento de las tensiones entre ambos países, informó este miércoles el Departamento de Estado.
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“El Secretario de Estado Antony J. Blinken viajará a Beijing, la República Popular China (RPC) y Londres, Reino Unido, del 16 al 21 de junio”, señaló a través de un comunicado el ente de EE.UU.
En este sentido, el Gobierno estadounidense apuntó que Blinken se reunirá con altos funcionarios de China con los que abordará “la importancia de mantener abiertas las líneas de comunicación para gestionar de manera responsable la relación entre Estados Unidos y la República Popular China”.
.@SecBlinken will travel to Beijing June 16-19 to discuss management of the U.S.-PRC relationship and issues of concern. He will then continue on to London from June 20-21 to attend the Ukraine Recovery Conference. https://t.co/GLBK8kRThs
— Matthew Miller (@StateDeptSpox) June 14, 2023
A su vez, la nota indicó que durante la estancia también se plantearán temas de interés bilateral, asuntos globales y regionales, así como la cooperación potencial en desafíos transnacionales compartidos.
De igual forma, el Departamento de Estado precisó que, durante su visita en Londres, el secretario asistirá a la Conferencia de Recuperación de Ucrania, marco en el cual se reunirá con sus homólogos del Reino Unido y Ucrania, entre otros funcionarios.
Por su parte, el vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Wang Wenbin, confirmó la visita mientras precisó que la misma se produce luego de que Blinken sostuviera una conversación telefónica con el canciller Qing Gang.
La visita del alto funcionario estadounidense tendrá lugar tras las acusaciones de Washington contra China por la supuesta apertura de una base de inteligencia asiática en Cuba para vigilar a EE.UU., lo cual ha sido rechazado enérgicamente por Beijing y La Habana.