Tess Asplund es la mujer afroamericana que se convirtió en el nuevo ícono de la lucha contra los neonazis en Suecia tras ser captada desafiando a un grupo de 300 manifestantes del partido Movimiento de Resistencia Nórdica (NRM) cuando marchaban por el primero de mayo en Borlänge, centro del país.
Su imagen con el puño en alto, fijando la mirada y desafiando a los neonazis hizo que se convirtiera en un ícono nacional y en un nuevo referente de la lucha contra el racismo.
El hecho fue captado por el fotógrafo David Lagerlöf durante la festividad del primero de mayo realizada el pasado domingo por los neonazis, quienes asistieron uniformados con camisa blanca y corbata verde, todos rapados y enarbolando banderas verdiblancas.
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Frente a una banda de neonazis indocumentados en Suecia #TessAsplund como imagen del valor y de los valores europeos pic.twitter.com/4qjSwIfy4V
— Edu Madina (@EduMadina) 5 de mayo de 2016
Se paró frente a los neonazis, levantó su puño y no emitió ni una sola palabra. Su gesto y mirada fueron suficientes.
La activista tiene 42 años, dos hijas, y nació en Cali (Colombia), donde fue adoptada cuando tenía siete meses por una familia sueca.
Agentes que custodiaban la manifestación trataban de impedir que la mujer se acercara a los radicales, pero ella logró manifestarse. Cuando terminó se fue del lugar y minutos después el fotógrafo subió la foto en su cuenta de Twitter y la imagen se viralizó rápidamente en el país y en el mundo.
Asplund es activista desde hace 26 años y miembro de la organización Dalarna contra el Racismo, tras la repercusión de la imagen fue entrevistada por varios medios británicos a los que declaró que su acción fue parte de un impulso: “Estaba enfadada cuando pasaron caminando simplemente sentí que no deberían estar ahí y salí a la calle".
"Los nazis están muy enfadados, así que ahora pienso que quizá no tendría que haberlo hecho; solo quiero paz y tranquilidad”, manifestó.