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Las ocho escuelas jesuitas que existen en Cataluña eliminaron asignaturas, exámenes y horarios con el propósito de convertir las aulas en espacios donde los estudiantes aprendan mediante proyecto conjuntos.
El director general de la Fundación Jesuitas Educación (FJE) de Cataluña, Xavier Aragay, explicó que "con el actual modelo de enseñanza tradicional, los alumnos se están aburriendo y se están desconectando del sistema, sobre todo a partir de sexto de primaria".
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Aragay indicó que en los seis primeros meses de experimentación se ha constatado que "el método funciona" y los estudiantes están reanimados.
"No hay asignaturas, ni horarios, al patio se sale cuando los alumnos deciden que están cansados", dijo Aragay.
El directo general reconoció que se trata de un cambio radical, pero que éste ha sido apoyado por dos de cada tres de los mil 500 profesores de las ocho escuelas.
Este nuevo modelo pedagógico ya inició en tres escuelas, desde el 5° de primaria hasta el 1ºo de Educación Secundaria Obligatoria (ESO), y luego se irá ampliando al resto de las unidades educativas.
En esas tres escuelas donde ya se está implementando el nuevo modelo, se unieron dos clases de 30 alumnos en una sola de 60, con la ventaja de que ahora cuentan con tres profesores en vez de uno.
Los tres profesores acompañan a los alumnos durante los proyectos conjuntos, los cuales están diseñados para ayudarlos a adquirir competencias básicas marcadas en el currículo.
"Por ejemplo, si hacemos un proyecto sobre el imperio romano, pues aprendemos arte, historia, latín, religión y geografía", detalló el director general adjunto de la FJE, Josep Menéndez.
El nuevo modelo pedagógico de las escuelas de Cataluña también incluye la creación de una nueva etapa intermedia entre la primaria y la secundaria, que la conforman los cursos 5º y 6º de primaria y 1º y 2º de ESO.
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