El Bank of New York Mellon (BoNY), que tiene bloqueados 534 millones de dólares que pagó Argentina a acreedores, envió una carta al juez neoyorquino Thomas
Griesa en la que sugirió que el tribunal estadounidense debe emitir una orden de bloqueo de fondos.
Mediante la misiva, se defendieron de los señalamientos de impunidad que hicieron los bonistas a los que iba dirigido el pago contra esa institución bancaria, pues le pertenecen los fondos debido a que ya Argentina los depositó a su nombre.
En la carta también asegura que "el tribunal (de Estados Unidos) tiene la autoridad para emitir la orden propuesta (de bloqueo de los fondos) y debería hacer ejercicio de su poder por el beneficio de la no-parte del Bank of New York Mellon, que está comprometida con los requerimientos de esta corte y actuó en consonancia con ellos".
La carta del BoNY sirve también como respuesta a una que remitieron los bonistas europeos el pasado 4 de agosto, apuntando a denunciar al banco estadounidense amparados en las leyes europeas por no efectuar el pago y seguir las órdenes del juez Griesa.
El BoNY redactó hace semanas una moción de aclaración a Griesa para saber qué hacer exactamente con el dinero ingresado por Argentina el 26 de junio, pero sigue esperando una respuesta más allá de la recomendación que el juez hizo en la vista del 27 de junio y que reiteró posteriormente.
Argentina argumenta que los 534 millones de dólares, una vez depositados en la cuenta del agente fiduciario, ya no es suyo sino de los bonistas, y que por consiguiente Griesa no puede retenerlo ni embargarlo.