Cerca de 60 mil pasajeros se vieron afectados por el paro de trabajadores de los gremios aeronáuticos que rechazan el proyecto de ley del Gobierno argentino que modifica el sistema de cálculo de los haberes jubilatorios.
La medida que concluirá este martes a las 15H00 GMT suspendió la mayoría de los vuelos comerciales en las principales terminales del país, los aeropuertos Jorge Newbery y Ezeiza, el primero de vuelos regionales y el segundo de vuelos internacionales.
Aerolíneas Argentinas, la compañía de bandera del país, suspendió el lunes 268 vuelos entre tramos de cabotaje y regionales.
Por su parte, la empresa Latam, que reúne capitales chilenos y brasileños, precisó que cancelará un total de 127 vuelos: 73 internacionales y 54 domésticos.
"Todas las líneas aéreas regulares y no regulares se adhieren al paro hasta las 12 del mediodía. El resto de los sindicatos aeronáuticos también están parando. Será imposible volar hasta las tres o cuatro horas posteriores al levantamiento de la medida", advirtió el secretario general de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), Pablo Biró.
La reforma rechazada por los gremios aeronáuticos cambia la fórmula sobre la que se establecen los haberes de la clase pasiva, lo que para expertos de la oposición supone una merma en los ingresos de los jubilados.
Con la fórmula actual el aumento de marzo próximo debería ser de casi un 12 por ciento mientras que con el cambio pasaría a ser del 5,7 por ciento, según la Procuraduría del Tesoro de la Nación.