El secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, se reunió este jueves en Portugal con el líder socialista y primer ministro António Costa, para empaparse de su estrategia política y crear en su país una coalición de partidos de izquierda, en caso de que el Partido Popular (PP) no logre formar Gobierno.
El primer ministro luso consiguió el apoyo del Partido Comunista (PC), que por más de 40 años le dio la espalda por las diferencias ideológicas.
En la nota, recordaron que el PC aboga por la salida de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), del euro o la nacionalización de la banca. También necesitaban sacar del juego político al derechista Pedro Passos Coelho, responsable de las políticas de recorte en Portugal.
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En ese orden, el PC aportó sus 17 escaños, y además contaron con los 19 puestos del Bloco de Esquerda.
Todo este escenario político es un antecedente para el PSOE, el cual envió una carta abierta a la dirección socialista en la que solicitan al secretario general evaluar un pacto con Podemos y el resto de los partidos de izquierda.
"Un pacto de izquierdas es indispensable para las políticas de reconstrucción social que nuestro país necesita" así como para "el logro de un renovado pacto constitucional, dada la crisis del Estado español".
Para ello el PSOE demuestra estar dispuesto a la “negociación con Podemos y otras fuerzas políticas que hay que aprovechar".
No todo el camino está abierto para el Partido Socialista si no prevé abogar por el referendo soberanista de Cataluña, cuestión que pide Podemos y este no ha dado muestras de apoyo.