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La oposición venezolana marchó este jueves en la denominada "Toma de Caracas" para exigir que se fije la fecha de recolección de 20 por ciento de las firmas de cara al referendo revocatorio presidencial. No obstante, el Consejo Nacional Electoral (CNE) ya había indicado que se hará en la semana entre el 24 y el 30 de octubre.
La movilización opositora concluyó a alrededor de las 14H00 (hora local), cuando el secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad (MUD), Jesús Torrealba leyó la hoja de ruta de la oposición. Esto anteriormente fue señalado por el dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Freddy Bernal, como un plan desestabilizador de 30 días.
Según lo anunciado por Torrealba, la noche de este 1 de septiembre harían un cacerolazo nacional. El miércoles 7 de septiembre protestarían en las oficinas del CNE de las capitales de cada estado del país para exigir fecha -que ya está definida- de recolección del 20 por ciento de las firmas del padrón electoral.
El 14 de septiembre harán una jornada nacional de movilización de 12 horas de duración en todas las capitales de estado. La última actividad, que aún no ha sido aclarada, buscará la realización inmediata del referendo revocatorio, es decir, por encima de las leyes.
Voceros del Gobierno declararon que el plan de golpe de la derecha sigue vigente e instaron a estar alerta ante las amenazas que ha recibido el presidente Nicolás Maduro.
Normally at this hour this highway is packed. @telesurenglish pic.twitter.com/2FZX7RX6yG
— Cody Weddle (@CodyWteleSUR) 1 de septiembre de 2016
>> Lo que debe saber de la opositora "Toma de Caracas"
La concentración del pueblo revolucionario estuvo encabezada por Maduro, quien salió junto al pueblo a las calles de la capital para defender la paz y soberanía del país ante la embestida de la derecha.
“Han fracasado una vez más... La victoria es del pueblo, de la paz, de la Revolución”, sentenció el mandatario.
Pres. Maduro addresses Chavista rally > pic.twitter.com/UmsWHqKZO7
— Cody Weddle (@CodyWteleSUR) 30 de agosto de 2016
Si se hiciera el referendo revocatorio antes del 10 de enero de 2017 y el resultado fuese terminar el mandato de Maduro, se convocaría a elecciones presidenciales. Si se hiciera después de esa fecha, ante ese escenario, asumiría el vicepresidente de la República por lo que reste de período, es decir, hasta 2018.
Pese a múltiples irregularidades denunciadas, fue validado el 1 por ciento de las firmas recolectadas por la oposición para activar el revocatorio. No obstante, el Consejo Nacional Electoral (CNE) debe cumplir con una serie de pasos, que podrían concretarse en hasta 213 días hábiles.
El paso siguiente es la solicitud formal de la autodenominada Mesa de la Unidad Democrática (MUD) para activar el proceso y que se habiliten las condiciones para recolectar el 20 por ciento de firmas del padrón electoral. Presentada la solicitud deben cumplirse dos fases, el examen de forma de la solicitud, y en segundo lugar la definición de los centros en los cuales se recolectará el 20 por ciento.
De acuerdo con la ley electoral, ese proceso podría tardar más de 38 días. Es decir, pedirle al CNE que fije las fechas este 1 de septiembre es pedirle que viole sus propias normas. LEER MÁS
