Uso descontrolado de armas en EE.UU. cobra la vida de un niño

El uso y porte descontrolando de armas de fuego en Estados Unidos nuevamente salta al debate. Un trágico incidente el pasado fin de semana en Chicago (norte), encendió un vez más las alarmas sobre este tema.

Un niño de apenas tres años perdió la vida accidentalmente de un disparo, mientras su hermano mayor manipulaba un arma de fuego en el interior de su vivienda.

Se presume que el padre de los niños, quién ya fue detenido por las autoridades, habría dejado la pistola en un lugar de fácil acceso para los pequeños, quienes tomaron el revólver para jugar.

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Según estudios estadísticos, un tercio de los niños estadounidenses viven en hogares con al menos un arma de fuego y sin la mínima seguridad y responsabilidad de los adultos.  Esto ratifica las recientes declaraciones del presidente Barack Obama, quien reconoció públicamente que por cada norteamericano, existe un arma.

De acuerdo a un índice de Desarrollo Humano de la ONU, los estadounidenses están también a la cabeza del número de homicidios por arma de fuego con 29,7 homicidios al año por cada millón de habitantes.

Hace una semana en Carolina del Sur (sureste de EE.UU.), una niña de dos años encontró un revólver Magnum 357 en el asiento trasero del auto donde se trasladaba. Posteriormente lo accionaría contra su abuela quien se encontraba al volante.

También a principios de octubre en Tennessee (sur de EE.UU.), un niño de 11 años acabó con la vida de una niña de 8 años debido a un disparo luego de una discusión.

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El 55 por ciento de los ciudadanos estadounidenses consultados actualmente, desean que el Congreso apruebe medidas que regulen la posesión de armas, lo que significa un aumento de seis puntos en relación con el año pasado. El 33 por ciento de la población prefiere que se mantenga el marco legal actual.