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Las autoridades israelíes continúan su lucha por terminar con la huelga de hambre que mantienen prisioneros palestinos en las cárceles de Israel, como protesta por las condiciones que violan sus derechos humanos.
La última medida tomada por las autoridades de Tel Aviv fue el traslado de 41 presos en huelga hacía la cárcel de Ohalei Keidar, en el desierto de Negev. Esta se suma a la prohibición de las visitas de los abogados.
Los palestinos presos en Israel iniciaron una huelga de hambre hace casi tres semanas para exigir el fin de las detenciones administrativas y mejores condiciones carcelarias.
Un abogado que se trasladó a la prisión de Ohalei Keidar indicó que los prisioneros son forzados a salir al patio todos los días al amanecer y son constantemente incursionados por el personal carcelario.
Hasta el momento, los presos se niegan a aceptar las negociaciones con las autoridades israelíes, mientras que la Liga Árabe solicitó a las Naciones Unidas iniciar una investigación internacional sobre las violaciones que han sufrido los presos palestinos en las cárceles de Israel.
>> Piden a ONU indagar trato cruel a palestinos presos en Israel
