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Hawái es azotada este viernes con fuertes vientos y lluvias que provocaron cortes de energía y derribo de árboles debido al acercamiento de dos huracanes a estas islas del Pacífico.
Isla Grande, la principal isla en el extremo sur de esta cadena volcánica, se preparaba para la llegada de Iselle, cuya fuerza fue rebajada a tormenta tropical cuando está a punto de tocar tierra, informó el Centro de Huracanes del Pacífico Central (CPHC).
En un hecho poco usual, Iselle es seguida por otro fenómeno más fuerte, el huracán de categoría tres Julio, con vientos sostenidos máximos de 195 km/h.
El ojo de la tormenta tropical Iselle está a 80 km de Hilo, en Isla Grande, pero la zona se ve afectada por fuertes lluvias, cortes de energía y varios de sus árboles fueron arrancados.
Las autoridades pidieron a la población que se quedara en sus casas, cerró todas las instalaciones públicas que no fueran de emergencia y envió a los trabajadores de regreso a sus hogares este viernes. En caso de evacuaciones, se dispuso que las escuelas sirvieran de refugio.
Las autoridades de Maui, la segunda isla en importancia de Hawái, con 150 mil habitantes y que recibe al menos dos millones de turistas al año, prohibieron actividades como baño, navegación y buceo.
"En 22 años que llevo aquí, nunca había visto nada de esta magnitud", dijo a la AFP Tim White, propietario de una tienda.
El archipiélago de Hawái (EE.UU.) se preparaba este jueves ante la posible llegada de dos huracanes, Iselle y Julio, que podrían tocar tierra hoy (jueves) y el domingo, respectivamente, en un acontecimiento meteorológico al que las islas no asisten desde hace más de dos décadas.
