El asistente del secretario de Defensa de Estados Unidos (EE.UU.), Peter Cook, informó este jueves mediante un comunicado la muerte del facilitador de Al-Qaeda, Abd al-Jalil al-Muslimi y del líder Mohammad Habib Boussadoun al-Tunisi.
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Boussadoun y Muslimi eran ambos de origen tunisio. Boussadoun arribó a Siria en 2014 después de pasar varios años en países europeos y del Medio Oriente. El comunicado informó que Boussadoun mantenía contacto con múltiples extremistas de la región.
Muslimi entrenó a finales de la década de los noventa con grupos Talibanes.
El ataque aéreo fue ejecutado el martes 17 de enero en la localidad de Saraqib en la provincia noroccidental de Siria, Idlib.
Cook declaró que: “La muerte de Abd al-Jalil al-Muslimi afectará el acceso a los veteranos de Al Qaeda a Siria. Lo que dificultará sus planes terroristas” y agregó: "La muerte de Boussadoun degrada el conjunto de líderes, luchadores y colaboradores de Al Qaeda con experiencia en operaciones externas".
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Finalizó el comunicado reafirmando la determinación de EE.UU. de continuar con acciones para dificultar las actividades del grupo en territorio sirio.