La incorporación de nuevos beneficiarios al sistema de jubilación de Argentina es una de las banderas del Kirchnerismo como parte de la década ganada, donde la implementación e incorporación de políticas sociales ha mejorado la calidad de vida de los ciudadanos de este país.
La norma que establece lo referente al sistema jubilatorio, es un régimen especial de regularización voluntaria de deudas provisionales para trabajadores autónomos y pequeños contribuyentes que hayan cumplido la edad de jubilación (60 años en el caso de las mujeres y 65 para los hombres), o la cumplan dentro del plazo de dos años desde dicha fecha.
Los requisitos de adhesión a la moratoria constan en la resolución conjunta general 3673 y 533 de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), respectivamente.
Esos futuros beneficiarios podrán regularizar los aportes por el período que va desde 1993 a 2003 con un plan de pagos de 60 cuotas, que serán descontadas del haber previsional.
Para la inclusión en el régimen se tendrán en cuenta los ingresos brutos anuales percibidos, que no deberán superar los límites vigentes para el derecho a la percepción de la asignación familiar; si el período de percepción es menor a doce meses, se considerará la cantidad de meses efectivamente liquidados o declarados, según corresponda.