Maestros protestan contra cierre de escuelas en Puerto Rico

Docentes de Puerto Rico se oponen al fallo del Tribunal Supremo de ese país que deroga la medida que establecía la paralización del cierre de escuelas impulsado por el Gobierno de Ricardo Rosselló.

La resolución del tribunal contó con el favor de seis de los jueces del Supremo, todo de acuerdo con el cierre de las escuelas.

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Uno de los jueces, Rivera García, justificó el cierre de escuelas afirmando que este está relacionado con la planificación de estructura administrativa del Departamento de Educación, cuyo fin es procurar el "buen uso de la propiedad pública".

La resolución judicial indica que el cerrar nueves escuelas no viola de ninguna manera el derecho a la educación de los niños puertorriqueños. Sin embargo, la presidenta de la Asociación de Maestros de Puerto Rico, Aida Díaz, manifestó que la decisión es "frustrante", pero al mismo tiempo un motivo para la lucha colectiva en contra de las políticas de Ricardo Rosselló.

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Docentes y padres consideran que la sentencia del Tribunal solo apoya el plan del Ejecutivo de cerrar 265 escuelas públicas, obviando el derecho de los niños a la educación.

En los últimos dos años, el Gobierno de Puerto Rico gracias a su política de cierre de escuelas y presión al magisterio ha reducido la plantilla de maestros de 31.000 a 22.600, es decir, cerca de nueve mil docente están fuera del sistema en la actualidad.

La presidenta de la Federación de Maestros de Puerto Rico (FMPR), Mercedes Martínez, afirma que con estas decisiones la Administración de Rosselló solo busca obligar a los maestros a trabajar en las escuelas chárter con bajos sueldos y sin derechos laborales.