El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por su sigla en inglés) alertó este lunes que en el este de Alepo (Siria) ya no quedan hospitales y más de 100 mil niños permanecen atrapados por causa de los últimos bombardeos aéreos contra centros de salud y escuelas.
"Hemos visto imágenes de niños tratados por síntomas de asfixia en el este de Alepo. Poco después, el hospital Al Bayan es bombardeado y madres aterrorizadas llevan a sus hijos al sótano mientras niños enfermos son sacados de las incubadoras para ser llevados a un lugar seguro", aseveró Geert Cappelaere, director de la Unicef para la zona de Oriente Medio y el Norte de África.
"Ha sido una semana horrible para los niños sirios, que viven y mueren bajo los bombardeos ininterrumpidos de colegios, casas y hospitales", agregó.
En lo que va de 2016, la Organización de las Naciones Unidas ha contabilizado 84 ataques contra escuelas en Siria y más de 69 niños han perdido la vida.
Recientemente, en el colegio de primaria de Al Qarma, cerca de Damasco, una niña murió y al menos otros 15 menores resultaron heridos cuando la escuela recibió un impacto directo. Los niños, de 10 años, estaban en una clase de matemáticas.