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El legislador del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil, Humberto Costa, denunció el viernes que la visita de la comitiva de senadores brasileños a Venezuela fue una estrategia de la derecha de la nación suramericana.
"A la derecha brasileña le interesa una confraternización con la extrema derecha venezolana", explicó Costa, quien también es suplente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, respecto a la radicalización del discurso del senador del Partido de la Social Democracia de Brasil (PSDB), Aécio Neves.
Neves asegura que los senadores brasileños fueron atacados, lo que para Costa se considera "lo que quisieron los senadores brasileños es ridiculizar allí de la misma manera que lo hacen aquí".
En ese sentido, reiteró que "fue un intento de interferir en la política interna de otro país, por medio de un diálogo con el segmento más radical de la derecha de Venezuela", y se preguntó: "¿Por qué no se preocupan en ir a Estados Unidos a investigar la matanza de negros pobres?", cita la agencia rusa Sputnik.
La presidenta Dilma Rousseff rechazó la intención de un grupo de senadores brasileños de visitar a responsables de actos violentos ocurridos en Venezuela en 2014 constituyó una afrenta a la soberanía venezolana.
De acuerdo con el sitio digital Folha Politica, la mandataria aseguró que la comitiva liderada por el senador Aécio Neves, del Partido de la Social Democracia Brasileña, puso una trampa al Gobierno de Rousseff y protagonizaron una vergüenza para el gigante suramericano.
El viernes, la Cancillería de Venezuela rechazó categóricamente la maniobra mediática de grupos de la derecha nacional e internacional por intentar construir, sobre la base de mentiras, un argumento válido del viaje de un grupo de senadores brasileños que llegaron a ese país suramericano para “desestabilizar la democracia venezolana y generar confusión y conflicto entre países hermanos”.
Costa la recordó que la senadora del PSDB, Lúcia Vania, esta semana anunció en el Senado su salida del partido después de 20 años legislando, por "no creer en una oposición movida por el odio y promover una confrontación irracional, avivando los caminos para los extremos la violencia".
En contexto
La comitiva liderada por el senador Aécio Neves, del Partido de la Social Democracia Brasileña, puso una trampa al Gobierno de Rousseff, su viaje se dio pocos días después de la visita que realizó al país el expresidente español Felipe González, quien también expresó su apoyo a los responsables por los actos violentos de 2014.
La visita de políticos de distintas nacionalidades ligados a los sectores de derecha han sido denunciados por el Gobierno venezolano por representar una injerencia en los asuntos internos del país suramericano, además de una afrenta contra la justicia, dado que están orientados a presionar para obtener impunidad para los responsables de muertes de venezolanos durante las protestas violentas de 2014.
