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Publicado 28 septiembre 2016



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El expresidente colombiano Ernesto Samper comentó que a su país aún le queda mucho camino por andar para erradicar de manera definitiva la violencia. 

El secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper, destacó que la organización nació para defender la paz en la Región por lo que invitó a los colombianos a tomar una decisión el próximo 2 de octubre cuando se desarrollará el plebiscito.

"Nosotros somos un oasis de paz en el mundo. Cuando el mundo se está matando nosotros todavía podemos levantar la bandera de una región en paz, sin armas nucleares, sin bases extranjeras, una región en la que no hay posibilidades de golpes militares", recalcó.

Samper emitió estas palabras en su discurso inaugural del III Encuentro Latinoamericano Progresista (ELAP) 2016 que se desarrolla en Quito, Ecuador. 

Al comienzo de sus palabras comentó que ciertamente a Colombia aún le falta mucho camino por andar, en el que puedan construir un nuevo país que erradique de manera definitiva la violencia, sin embargo, destacó que el acuerdo entre el Estado y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia- Ejército del Pueblo (FARC-EP) es el gran inicio para llegar a ese objetivo.

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Destacó que el acuerdo de La Habana tiene lo necesario para convencer a la guerrilla de que haga un nuevo intento para lograr a través de la política lo que estaban consiguiendo  por la vía de las armas como el caso de la lucha por las tierras.

Samper comentó que en los últimos 50 años en Colombia no se ha producido una nueva reforma agraria, por el contrario, se han creado dos contrarreformas que han concentrado las tierras en poder del narcotráfico y los paramilitares. "Más de 8 millones de hectáreas deberán ser repartidas según los nuevos acuerdos".

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El secretario general de la Unasur mencionó algunos de los puntos plasmados en el acuerdo firmado el 26 de septiembre en Cartagena, como la fórmula de sustitución social de cultivo que le permitirá a los campesinos reemplazar de manera voluntaria sus cultivos sin estar amenazados por las fumigaciones aéreas.

También recalcó que el cuarto punto de los acuerdos, quizás el más importe, es que las víctimas son la preocupación principal y no los victimarios, como ocurrió en pasados procesos de negociación.

Samper hizo referencia a la campaña de descrédito que han emprendido expresidentes colombianos como Álvaro Uribe a quienes calificó "aves de mal agüero" por decir que con la aprobación del acuerdo habrá impunidad porque se negociará la verdad a cambio de la justicia. 

"Las víctimas lo que quieren es saber la verdad, dónde están enterrados sus familiares, dónde fueron sacrificados sus hijos, y a partir de la verdad tendrá que haber algo de justicia y mucho de reparación", puntualizó.

Invitó a los colombianos a cruzar el puente de la justicia transicional para entrar al posconflicto y poder construir una sociedad conviviente en la que se puedan resolver los problemas sin violencia.

En contexto

El Gobierno de Colombia y las FARC- EP firmaron el 26 de septiembre el Acuerdo final de Paz para terminar la confrontación armada de 52 años de antigüedad, que dejó 220 mil muertos y millones de desplazados.

El 24 de agosto de 2016, el Gobierno de Colombia y las FARC-EP anunciaron el acuerdo final de paz. El documento pasó a manos del Congreso de Colombia el 25 de agosto.

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, notificó al Congreso su decisión de llamar a un plebiscito el próximo domingo 2 de octubre de 2016.

El envío del acuerdo original al Congreso por parte del Gobierno cumplió con el plazo mínimo de 30 días que tenía para difundir los acuerdos con las FARC- EP antes del plebiscito, de tal manera que Colombia conociera qué se votaría en las urnas. 


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