La Fuerza Aeroespacial rusa destruyó 204 objetivos del autodenominado Estado Islámico (EI), en Siria, tras su participación en 82 misiones de combate, en apenas 24 horas.
Los aviones despegaron desde la base aérea Jmeimim hacia las provincias de Alepo, Idlib, Latakia, Hama y Homs, según informó el portavoz oficial del Ministerio de Defensa, el mayor general Ígor Konashénkov.
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La fuerza rusa utilizó misiles de crucero Kalibr y bombas aéreas guiadas de alta precisión KAB-500, además participó por primera vez el submarino Rostov na Donú, que se encontraba en el Mar Mediterráneo.
Ya los misiles de crucero habían sido utilizados en la Flota del Mar Caspio, pero éste último se caracterizó por haber sido ejecutado desde el fondo del agua con ayuda del sistema de torpedos con el que está equipado el Rostov na Donú, añadió Konashénkov.
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