Múltiples ataques terroristas con obuses de morteros y misiles contra zonas residenciales de Damasco, capital de Siria, ocasionaron la muerte de al menos ocho civiles y heridas a otras 32 personas.
Medios locales informan que una explosión en la entrada del populoso barrio de Mezzeh 86 mató a dos hermanas de tres años y seis meses de edad respectivamente, y a su padre, mientras que la madre se encuentra en estado crítico.
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El capitalino hospital materno-infantil de Barankah fue impactado por un mortero mientras que la explosión de un misil provocó la quema de tres vehículos en la barriada de Kusor.
Autoridades registraron en la zona de Jaramana una andanada de 10 proyectiles de morteros que causó la muerte a tres personas e hirió a otras 11.
Seis civiles resultaron gravemente heridos a consecuencias de los proyectiles que cayeron en el barrio de Kassa, mientras que una persona murió en el parque de Adawi, cerca de Mazraa.
Desde el pasado mes de agosto incrementaron los ataques terroristas contra zonas residenciales en Damasco, registrándose hasta la actualidad más de 80 civiles muertos y cerca de 400 heridos.
CONTEXTO: Siria es uno de los países de Oriente Medio con la peor crisis humanitaria, en la que más de tres millones de civiles se han visto desplazados de forma externa y seis millones de manera interna, debido a la violencia de grupos terroristas, que mantienen el control en algunas ciudades.
Estos mercenarios de acuerdo con expertos internacionales son financiados por Occidente con la intención de derrocar al presidente sirio Bashar Al Assad sin medir las consecuencias de su expansión.
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