Para acabar con la guerra hay que bajar las armas. En Colombia, hay 8.074.272 víctimas del conflicto armado, según el Registro Único de Víctimas (RUV), es cada una de ellas, la razón por la que defensores de derechos humanos insisten en mantener el cese al fuego entre el Gobierno de Colombia y los grupos insurgentes.
Tras los diálogos en La Habana, Cuba, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP) y el Gobierno de Juan Manuel Santos acordaron detener los enfrentamientos armados a partir del 29 de agosto de 2016.
Comenzó entonces una nueva etapa para las víctimas. Hubo inmediatamente una disminución de las solicitudes de las víctimas para ingresar a la lista de los afectados por el conflicto, comparado con otros años.
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De acuerdo con el RUV, en 2015 se contabilizaron 189.600 víctimas, mientras que en 2016 la cifra disminuyó a 96.039. Además, el cese al fuego con las FARC-EP, hizo posible más oportunidades para acceder a la educación y empleos formales.
Más tarde, el 1 de octubre de 2017 alcanzaron un acuerdo de cese al fuego bilateral el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las fuerzas armadas del Estado, que estuvo vigente hasta este 9 de enero de 2018.
Colombia exige la Paz. Hago un llamamiento al Gobierno y el ELN para que escuchen la voz de la gente, decreten un cese el fuego bilateral y retomen la senda de las negociaciones y el diálogo. El futuro es de los valientes.@EquipoPazGob @ELN_Paz
— Piedad Córdoba (@piedadcordoba) 10 de enero de 2018
Se registró desde el pacto una nueva disminución de la cantidad de víctimas de acuerdo con el RUV. En 2017, la cifra fue de 56.247.
El Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos (Cerac) destaca en su último informe de diciembre que “la última ocasión en la que se registró un período de tiempo así de largo, sin que se presentaran combates, fue en mayo del año 2012”.
"Hay una gran carga de alivio humanitario en las regiones, producto del cese al fuego bilateral. Para nosotros es muy importante que las conversaciones sigan desarrollándose en medio de un cese al fuego" Cdte. Pablo Beltrán pic.twitter.com/2e4GlktK68
— Voces de Colombia (@eln_voces) 10 de enero de 2018
El comienzo del conflicto armado social se pone en contraste con la actualidad colombiana para valorar los avances de las negociaciones. Los más de 50 años de enfrentamientos, han dejado 7.134.646 desplazados, 983.033 homicidios, 165.927 desapariciones forzadas, 10.237 torturas y 34.814 secuestros, entre otros hechos violentos.
Los resultados son la clave para medir la confianza entre el Estado, los grupos insurgentes y la población. Ahora, ante la decisión de prolongar el cese al fuego entre el ELN y el Gobierno de Santos, existe el riegos de retomar el sendero de la violencia generalizada de años anteriores.
Esta mañana reiteré a nuestras Fuerzas Armadas actuar con contundencia y responder a esta agresión del Eln. Mi compromiso con la paz será indeclinable, pero a esta se llega con hechos concretos, no solo con palabras.
— Juan Manuel Santos (@JuanManSantos) 10 de enero de 2018