Se espera que la llegada del mandatario griego a Rusia reconduzca la situación entre ambos países, inestable desde hace unos meses por desagravios diplomáticos.
El primer ministro de Grecia, Alexis Tsipras, visita Moscú este viernes por invitación del presidente ruso, Vladímir Putin, con la intención de retomar el diálogo y reducir la tensión existente entre ambos países.
A su llegada a la capital rusa, una de las primeras acciones de Tsipras fue acudir a la Tumba del Soldado Desconocido y hacer una ofrenda.
La llegada de la autoridad griega a Rusia busca reconducir la situación entre ambos países, que se encuentra inestable desde hace unos meses.
"Nuestro objetivo es restablecer las relaciones bilaterales que se pusieron a prueba, así como debatir con franqueza todos los temas actuales", informó el primer viceministro griego de Exteriores, Georgios Katrougalos, sobre la visita de Tsipras.
Tsipras planeaba viajar a Rusia en la segunda mitad de 2018, pero su visita se aplazó a causa de un desagravio diplomático entre Moscú y Atenas, ya que en agosto Grecia decidió expulsar a dos diplomáticos rusos y prohibió a otros dos el ingreso al país, acusando a Moscú de supuestas acciones ilegales contra la seguridad nacional.
Por su parte, Rusia siempre ha negado las acusaciones.
A su vez, el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, subrayó que Rusia sigue considerando a Grecia como un socio importante para mantener la paz y la estabilidad en Europa, en particular, en la región del Mediterráneo oriental y en los Balcanes.
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