El papa Francisco condenó este sábado el atentado en el Cairo (capital de Egipto), donde murió una persona y otras diez resultaron heridas. El pontífice envió un telegrama de condolencia a los familiares de las víctimas.
El secretario de Estado del vaticano, Pietro Parolini, transmitió el mensaje del Pontífice al presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, en el que llama a "los actores políticos y religiosos" a unir fuerzas contra la "plaga del terrorismo".
Esta nueva explosión sacudió un edificio de Seguridad Nacional de Egipto en la ciudad de Asyut, ubicada en el sur de El Cairo, informaron medios internacionales.
El hecho ocurrió frente a la torre donde funcionaba el consulado italiano, medios locales suponen que el ataque pudo ser perpetrado por el grupo Wilayat Sina, afiliado a la red Al-Qaeda, el cual también juró lealtad al grupo extremista takfirí autodenominado Estado Islámico (EI) en noviembre pasado.
En contexto
Los atentados terroristas han aumentado en Egipto, principalmente en el Sinaí contra las fuerzas de seguridad, a raíz del golpe militar en julio de 2013, contra el entonces presidente, el islamista Mohamed Mursi.
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El presidente egipcio, Abdel Fatah al Sisi declaró el norte de la península, zona de exclusión militar, imponiendo el toque de queda e impidiendo el acceso a los medios de comunicación. Varios miembros de la Hermandad Musulmana fueron arrestados tras la muerte de Barakay. La situación que está sucediendo en el Sinaí es preocupante, porque está a menos de 200 kilómetros de Israel.