Rusia sostiene que no utiliza los recursos energéticos para hacer presión política ni realizar acciones oportunistas.
El embajador ruso en Washington, Anatoli Antónov, refutó las amenazas de sanciones y acusaciones en contra de su país, incluidas en el reciente acuerdo entre los Estados Unidos y Alemania sobre el gasoducto Nord Stream 2.
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De acuerdo con Antónov, Moscú no acepta tal retórica “al igual que no podemos aceptar la práctica de sanciones unilaterales ilegítimas”, según dijo en declaraciones a la prensa local.
Aseveró que el tono de hostilidad contra Rusia de la declaración está en contraposición con el espíritu de las conversaciones que mantuvieron los mandatarios Vladímir Putin y el estadounidense, Joe Biden, en Ginebra el 16 de junio pasado.
En consonancia con lo acordado entre Berlín y Washington, EE.UU. no pondrá obstáculos a la terminación del Nord Stream 2, más se reservará el derecho de actuar ante el presunto “uso de la energía por parte de Rusia como arma geopolítica en Europa” y para agredir a Ucrania.
��#Zakharova Despite the attempts of ����#USA to politicise a project beneficial for ����#EU, @NordStream2 will soon be launched.
— MFA Russia ���� (@mfa_russia) July 22, 2021
☝️ We are convinced this gas pipeline will operate reliably to supply affordable energy to European consumers and enhance Europe’s energy security. pic.twitter.com/ZJyTYgTMf4
En este sentido, el texto establece que Alemania tendrá que tomar “medidas rápidas” a nivel nacional e “'insistir en una acción eficaz a nivel de la Unión Europea”, además brindar garantías para proteger el suministro energético de Ucrania.
Al respecto, el jefe de la diplomacia alamana, Heiko Maas, publicó en su cuenta en Twitter su “alivio” tras encontrar una “solución constructiva”, en referencia al acuerdo.
“Ayudaremos a Ucrania a construir un sector de energía verde y presionaremos para asegurar el tránsito de gas a través de Ucrania en la próxima década”, añadió.
Bin erleichtert, dass wir in Sachen #NordStream2 mit den #USA���� eine konstruktive Lösung gefunden haben. Wir werden die #Ukraine���� beim Aufbau eines grünen Energiesektors unterstützen & uns dafür einsetzen, den Gastransit durch die Ukraine im nächsten Jahrzehnt zu sichern.
— Heiko Maas ���� (@HeikoMaas) July 21, 2021
Antónov criticó los intentos de presentar a su país como un agresor, o como que actúa con malicia y destacó que esa se ha convertido en la estrategia distintiva de la rusofobia. “Las amenazas que se nos dirigen son infundadas e inútiles”, agregó.
Asimismo, explicó que su país ha demostrado ser un socio confiable en muchos años de interacción honesta con la región europea en materia de consumo de hidrocarburos.
��#Zakharova Despite the attempts of ����#USA to politicise a project beneficial for ����#EU, @NordStream2 will soon be launched.
— MFA Russia ���� (@mfa_russia) July 22, 2021
☝️ We are convinced this gas pipeline will operate reliably to supply affordable energy to European consumers and enhance Europe’s energy security. pic.twitter.com/ZJyTYgTMf4
“Nunca hemos impuesto nuestros suministros a nadie, no usamos los recursos energéticos como instrumento de presión política y no intentamos resolver ningún objetivo estrechamente oportunista como se nos atribuye”, arguyó.
El gasoducto Nord Stream 2 posibilitará el traslado de hasta 55.000.000.000 de metros cúbicos de gas natural anualmente desde Rusia a Alemania por el fondo del mar Báltico, sin embargo, provocaría pérdidas a las empresas estadounidenses que venden gas natural de esquino a países de la región.
��
— Russian Embassy in USA ���� (@RusEmbUSA) July 21, 2021
�������� Vladimir #Putin had a�� conversation with Federal Chancellor of the Federal Republic of Germany Angela #Merkel at her initiative.
⛴️The leaders are satisfied with the construction of the @NordStream2 gas pipeline, which is nearing completion.
��https://t.co/bKaJXmH3hQ pic.twitter.com/ZhLmeXEaBs
Al respecto, Antónov dijo que tanto este gasoducto como otros construidos por parte de Rusia, pasan por acuerdos comerciales con los Estados que tienen interés en el combustible de esa nación.
La construcción de proyecto había traído una disputa entre EE.UU. y Alemania, pues la nación norteamericana se opuso firmemente durante dos años a su construcción.
Sin embargo, en la primavera, el mandatario estadounidense desestimó la idea de imponer sanciones para bloquear el proyecto, dejando en manos de la confianza en Alemania de sostener intereses comunes.