Panameños en quinta jornada de protestas contra concesión minera

Trabajadores y representantes de diversos sectores panameños reanudaron este viernes sus movilizaciones en rechazo a la minería y a la suscripción por el Gobierno del presidente Laurentino Cortizo de la ley 406, que concede a una multinacional canadiense una concesión para explotar por otros 20 años una mina de cobre al norte del país centroamericano.

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Tras la represión ejecutada la víspera contra los manifestantes, la Asociación de Profesores de Panamá convocó a una gran manifestación este viernes a partir de las 10H00 en la Iglesia del Carmen, en una céntrica zona de la capital.

Con esta movilización, el país entra en la quinta jornada de protestas en rechazo del referido contrato. En mensajes difundidos a través de las redes sociales, se aprecia a personas que se congregan en espacios públicos para exigir al Gobierno que revierta la renovación de una concesión minera a la filial de la trasnacional canadiense First Quantum Minerals.

Desde horas tempranas de la mañana, según medios locales, se reportan cierres en importantes vías de comunicación, como la Autopista Interamericana y el Corredor Sur capitalino, bloqueadas en diversos puntos. 

Integrantes del Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción y Similares (Suntracs), uno de los gremios más combativos, cerraron la avenida 12 de Octubre y realizaron un plantón frente a la sede de la Corporación Medcom. Tras hora y media de lucha, reabrieron la vía.

El contrato minero ha sido reiteradamente criticado porque la actividad de la referida minera ha causado perjuicios al medioambiente y a la salud de las comunidades en áreas aledañas, entre otras razones. Expertos y organizaciones de derechos humanos han planteado, además, que esa ley otorga a First Quantum Minerals un grupo de condiciones para desarrollar la actividad minera que menoscaban la soberanía nacional y son anticonstitucionales.

Este viernes también se reportó una protesta en rechazo al referido contrato minero en la ciudad española de Barcelona, frente a la sede de la representación diplomática panameña allí.