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La misión de la Cedeao confirmó el buen estado de salud del depuesto presidente Ibrahim Boubacar Keita.
La delegación diplomática de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao) y los líderes militares en Malí, que asumieron el poder tras un levantamiento armado, continuaron este domingo en Bamako las conversaciones para alcanzar una solución a la crisis política.
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Los delegados se reunieron este sábado en el aeropuerto con representantes del llamado Comité Nacional para la Salvación del Pueblo (CNSP), grupo que tomó el poder después del golpe de Estado.
La delegación, encabezada por el ex presidente nigeriano Goodluck Jonathan, mantuvo conversaciones durante media hora con los soldados que tomaron el poder el martes, incluido el coronel Assimi Goita, líder de la junta militar.
Los diplomáticos africanos también se reunieron con el presidente derrocado Ibrahim Boubacar Keita, quien aún se encuentra recluido en una villa.
Al respecto, el presidente de la comisión de la Cedeao, Jean-Claude Kassi Brou, confirmó la buena salud de Keita.
"Nos reunimos con el presidente Keita y le encontramos en buen estado de salud", comunicó Kassi Brou, quien ha agradecido a la actual junta militar "que facilitara tan rápidamente esta reunión".
El responsable de la Cedeao indicó respecto a la situación de las conversaciones que "las discusiones tuvieron lugar en un ambiente muy abierto y sentimos el deseo de avanzar de verdad".
"La solución que debemos encontrar, creo que todos están de acuerdo, es una solución que satisfaga ante todo a los malienses y que también sea beneficiosa para todos los países de la subregión", añadió.
La Cedeao espera mantener este lunes una nueva reunión con el expresidente y los líderes de la junta, con vistas a "solucionarlo todo", indicó.
El derrocado presidente Ibrahim Boubacar Keita y el primer ministro Boubou Cisse están detenidos en la base militar de Kati en las afueras de la capital, Bamako.
Un miembro de la junta dijo que los líderes del golpe habían puesto en libertad al exministro de Economía Abdoulaye Daffe y Sabane Mahalmoudou, el secretario privado de Keita, y calificaron la medida de "prueba de que respetamos los derechos humanos".
