El mandatario de Bolivia Evo Morales condenó las intenciones de intervención militar extranjera liderada por el Gobierno de Estados Unidos en contra de Venezuela, usando la intervención como una medida de solución, cuando realmente es un acto de sometimiento contra los pueblos latinoamericanos.
"Una intervención es para una dominación cultural, para robar los recursos naturales y de eso debemos estar convencidos, es nuestra obligación repasar la historia", afirmó Morales durante un acto presidencial celebrado este jueves en La Paz, capital.
Las intervenciones tienen el objetivo de dominar económica, cultural y socialmente a un país para robar nuestros recursos naturales. Por eso tenemos que reflexionar sobre nuestra lucha. Fue importante impulsar un instrumento político de liberación, ahora somos dignos y soberanos
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) 15 de febrero de 2018
Asimismo, señaló que la intervención militar no es la vía democrática, ni soberana que solucionan los problemas del pueblo, por el contrario los someten social, cultural y económicamente ante los imperios.
El jefe de Estado boliviano denunció al secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, de liderar una agenda en la región contra Venezuela durante su gira "proimperialista" por Latinoamérica, hecho que a su juicio se vio evidenciado con la presencia del jefe del Comando Sur en Colombia.
El imperio amenaza a Venezuela con una intervención armada. Recordemos lo sucedido con Irak, Afganistán y Libia, la intervención no es para dar soluciones, es para la dominación económica y cultural de un país; su única intención, es el saqueo de sus recursos naturales. pic.twitter.com/fkw0t4pQyE
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) 15 de febrero de 2018
Morales también hizo referencia al caso de Libia y Siria, países intervenidos por Estados Unidos, con las falsas intenciones de restablecer el orden democrático, político y económico, mientras que la verdadera intención era tomar las bases petroleras de ambas naciones, que aún enfrentan grandes conflictos y desidias.
El presidente de Bolivia reiteró su apoyo a la soberanía de Venezuela, al denunciar y rechazar de manera pública y ante diferentes organizaciones, como la Unión Sudamericana de Naciones (Unasur) su apoyo a la soberanía del pueblo venezolano.