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El Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff, dictó la resolución  el pasado 31 de diciembre.

El Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff, dictó la resolución el pasado 31 de diciembre. | Foto: Archivo

Publicado 21 abril 2015



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El presupuesto nacional de Brasil para este año calculó el gasto público de más de trescientos mil millones de dólares y un ahorro de unos 26 mil millones de dólares para saldar la deuda pública.

La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff sancionó el pasado lunes el presupuesto nacional de 2015, el cual prevé gastos de casi 1.2 billones de reales (unos 300 mil  951 millones 660 mil dólares) y un ahorro de 80 mil millones de reales (unos 26 mil millones 344 mil 400 dólares) para pagar la deuda pública, informó la agencia PT de noticias.

La resolución se ejecutó cinco meses después del plazo acordado el pasado 31 de diciembre, antes del receso parlamentario. La demora limitó los gastos del Gobierno en los primeros meses de este año a un doceavo por mes del valor calculado. “Tras la aprobación, la rutina vuelve a la normalidad”, reseñó la agencia PT.

El próximo miércoles se publicará a detalle, en gaceta oficial el presupuesto. El Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff tiene un periodo de tiempo de 30 días para definir el volumen de áreas en las que va a incidir el recorte.

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De acuerdo a lo informado por la Jefa de Estado a principios del mes de abril, su Gobierno estableció la meta del superávit primario de este año de 1,2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), alrededor de 80 mil millones de reales (unos 26 mil millones 344 mil 400 dólares) para el pago de la deuda pública, se adviritió el “fuerte” recorte presupuestario.

La meta indica rigor fiscal en el tratamiento presupuestario, lo que abre paso al Gobierno “restablecer la confianza y credibilidad del mercado en la política fiscal” y así continuar con las inversiones del sector productivo y el impulso de la economía.

El presupuesto también conserva la enmienda que asigna casi tres veces más recursos al Fondo Partididario de 289 reales (unos 95,16 dólares) a 867,5 millones de reales (unos 285 millones 672 mil dólares). “Con esto, el Gobierno comienza a poner en práctica el principio de financiamiento político con uso de recursos públicos y abre la discusión a la enmienda de la reforma política que prohíbe donaciones a campañas electorales de iniciativa privada, que ya se encuentra en el Congreso Nacional. La iniciativa de financiación pública de las campañas es respaldada por el Gobierno nacional y por el Partido de los Trabajadores (PT)”.

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