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Movimientos sociales y partidos políticos de Brasil, reforzaron su unión para participar este jueves en las movilizaciones de respaldo a la democracia que garantiza Dilma Rousseff y contra las acciones desestabilizadores que pretende la oposición para provocar la salida de la Presidenta.
Rechazarán además los intentos de provocar un golpe de Estado. Se prevé que las organizaciones populares se concentrarán en 10 capitales de los estados brasileños, informó el líder de la Central Única de los Trabajadores (CUT), Adir dos Santos Lima.
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La titular de la Unión de Estudiantes de Brasil (UNE), Carina Vitral, argumentó que “aprovecharemos esta ocasión para discutir los rumbos del gobierno y el país, y colaborar para encontrar una salida que asegure la reanimación y crecimiento de la economía con una Agenda Brasil que contenga propuestas sociales”
Por su parte, el coordinador Nacional del Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra (MTST), Guilherme Boulos, manifestó que garantizarán la participación de más de 20 mil personas en Sao Paulo (sureste).
La marcha también responderá a las protestas efectuadas el pasado 16 en la que se prevé discutir los mecanismos a implementar para lograr la reanimación y crecimiento de la economía con una Agenda Brasil que contenga propuestas sociales, indicó la presidenta nacional de la Unión Nacional de Estudiantes (UNE), Carina Vitral.
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El Partido de los Trabajadores (PT), del Gobierno, así como Comunista do Brasil (PcdoB), también se sumarán a la iniciativa.
La diputada federal y exalcaldesa de São Paulo, Luiza Erundina, aseguró el martes pasado en una entrevista del programa Espaço Público de TV Brasil, que el Gobierno de la presidenta Rousseff debe mantener un diálogo constante con los movimientos sociales para consolidar los lazos y encarar las arremetidas en lo político y económico.
“Para gobernar en un contexto adverso, con una correlación de fuerzas desfavorables, hay que contar con el apoyo de estas bases de la sociedad, sin las cuales uno es aplastado por el marco institucional vigente, que son el poder Legislativo, los Tribunales de Cuentas y el poder económico”, analizó Luiza Erundina.
En Contexto:
Grupos de oposición de Brasil manifestaron el pasado domingo en nueve estados de ese país suramericano contra el Gobierno constitucional de la presidenta Dilma Rousseff, la corrupción y los problemas económicos.
El senador Aloysio Nunes Ferreira pidió un juicio político contra Rousseff, pese a no haber presentado evidencias en contra de la dignataria.
En esas protestas, el máximo dirigente del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), el senador Aécio Neves, pidió la salida de la mandataria.
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