La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, confirmó que este lunes llegará al Congreso el Proyecto de Educación Superior a fin de dar curso a su tramitación, aun cuando esta reforma no cuenta con el respaldo de la población estudiantil, de los rectores de las universidades ni de algunos parlamentarios oficialistas.
En cadena nacional transmitida a las 10H00 hora local del domingo (00H00 GMT del lunes), la mandataria reconoció que el sistema educativo tiene limitaciones, genera discriminaciones y exige cambios, por lo que defendió el proyecto que plantea.
"No se puede esperar que los problemas sean resueltos sólo por el mercado, porque la educación no es un bien de consumo que se pueda administrar como un mero negocio", dijo.
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Bachelet explicó que la iniciativa propone cambios a la prueba de acceso a las universidades, y aseguró la educación superior sería gratuita.
"Miles de estudiantes ya han podido comprobar que la gratuidad llegó para quedarse. Ahora, queremos que quede establecido por ley que no hay vuelta atrás, que Chile conquistó un derecho permanente que se irá concretando gradualmente", ha recalcado.
Los estudiantes han convocado a una movilización para este martes para rechazar la iniciativa, debido a que consideran que el proyecto mantiene una lógica de mercado y deja la puerta entreabierta al lucro en la educación universitaria, además de incumplir la promesa de gratuidad universal comprometida por el Gobierno.
Desde 2011 los estudiantes se lanzaron a las calles para defender su derecho a estudiar sin estar condicionados por su capacidad económica, tras estas acciones, la iniciativa fue incluida en el programa electoral del segundo mandato de Bachelet y se estableció que el 70 por ciento de los estudiantes más vulnerables podrán acceder de forma gratuita a la universidad.
No obstante, por la brusca desaceleración económica que ha golpeado al país, el Gobierno recortó la cuota de forma considerable y desde el pasado 21 de mayo, el Ejecutivo modificó en más de cinco ocasiones las propuestas de gratuidad.
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No se puede complacer a todos
Michelle Bachelet asegura que en la elaboración del proyecto de ley "hemos escuchado con mucha atención a todos los involucrados: universidades, instituciones técnicas, estudiantes, académicos, parlamentarios", sin embargo, insistió que "no es posible dejar a todo el mundo contento", debido a que existen muchas miradas diferentes.
Detalló que el proyecto consagra y refuerza el carácter mixto de la educación superior, donde convivan instituciones estatales con instituciones privadas, en un ambiente de autonomía y pluralismo. Además, se creará una nueva institucionalidad, con una Subsecretaría y una Superintendencia y un Consejo de la Calidad, "con la fuerza para exigir el cumplimiento de estándares de excelencia que las familias esperan".
EEn ese sentido, se establecerá la acreditación obligatoria, no voluntaria, de todas las instituciones de educación superior, además se creará un nuevo marco de cualificaciones para que "cada título refleje y asegure los conocimientos y capacidades que se promete", agregó la Presidenta.