1. No utilices el móvil frente al sol
Lo mejor es entrar en un espacio cerrado, otra opción sería aumentar el brillo de la pantalla.
2. Ilumina tu alrededor mientras trabajas
Enciende las luces en cuanto sientas oscuridad en la oficina o la habitación donde te encuentras. Además, las luces del lugar en que te encuentres, naturales o artificiales, no deben reflejarse sobre la pantalla, ya que impactarán también, como si fueran un espejo, sobre tu vista, y te harás daño.
3. Aleja los dispositivos
Las pantallas de estos últimos deben estar a la altura de tus ojos y separados por lo menos a un brazo de distancia cuando no puedas tocar la pantalla con el brazo estirado, esa será la medida óptima, a la misma altura o más baja. Mientras que los smartphones y tabletas deben estar a unos 30 centímetros y por debajo de los ojos.
4. Usar aplicaciones específicas para el móvil
Abre la aplicación y pulsa automáticamente, los niveles bajarán. Otra opción es programar las horas del amanecer y el atardecer para que el móvil se adapte.
5. Mirar al móvil o a la tableta con los dos ojos
Mejor hacerlo con toda la mirada centrada en él, ya que sufriremos algún tipo de incomodidad. Y de nuevo, llegarán los dolores de cabeza.
6. Usa gafas especiales
Usar gafas evitaría algunos tipos de luz y con ello los dolores, sequedad o irritación en los ojos. En una óptica te recomendarán las adecuadas.
7. Baja o aumenta el brillo
Con un ordenador puedes seguir algunas opciones que aparezcan en la configuración del sistema operativo. En un dispositivo móvil deberás buscar también en el menú de ajustes. Adáptalo a lo que más te convenga.
8. Usa una tipografía grande y el zoom
Aumenta el tamaño de los caracteres o le dale zoom para ver mejor. Hay aplicaciones de móvil, como WhatsApp, que cuentan en su configuración con la posibilidad de aumentar el tamaño de las fuentes, mientras que los navegadores web permiten fácilmente con una tecla y la rueda del ratón aumentar el tamaño de la vista.
9. Adecúa tu lugar de trabajo
Sentarse de manera correcta para que los ojos se encuentren a una altura adecuada. Y no solo consiste en la posición de la espalda, sino en usar muebles adecuados.
10. Haz descansos, parpadea, desvía la mirada
Los expertos recomiendan alejarse de la pantalla cada 20 o 30 minutos, así como parpadear frecuentemente o cerrar los ojos: cuando pasamos mucho tiempo fijos delante de una pantalla parpadeamos menos y el lagrimal no puede hidratar igual al ojo.