Los organizadores decidieron comercializar boletos ilegalmente al agotarse las entradas para el encuentro deportivo.
En El Salvador, la Fiscalía General de la República (FGR) informó acerca de la captura en la madrugada de este jueves de cinco personas presuntas responsables de la tragedia ocurrida en el Estadio capitalino de Cuscatlán el sábado último, cuando fallecieron unas 12 personas y cientos resultaron lesionadas.
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Por medio de la red social Twitter, la FGR detalló que "luego de realizar las investigaciones respectivas, se ha logrado individualizar a los responsables de la tragedia ocurrida en el estadio Cuscatlán".
El ente judicial salvadoreño precisó que fueron arrestados, entre otros, el presidente del club de fútbol Alianza FC, Pedro Hernández, y el gerente general de la empresa Estadios Deportivos de El Salvador (Edessa), Reynaldo Avelar Contreras, quienes serán presentados ante los tribunales en los próximos días.
Luego de realizar las diligencias de investigación, se ha logrado individualizar a los responsables de la tragedia ocurrida en el Estadio Cuscatlán. pic.twitter.com/0LMuIBEPPJ
— Fiscalía General de la República El Salvador (@FGR_SV) May 25, 2023
Los detenidos son acusados por delitos de homicidio culposo, lesiones culposas y estragos públicos. Los organizadores decidieron comercializar ilegalmente boletos emitidos para encuentros anteriores al agotarse las entradas disponibles para el evento deportivo.
Las investigaciones mostraron que las puertas habilitadas en el estadio no eran suficientes para el número de aficionados y que no fueron abiertas con la debida anticipación para un ingreso ordenado y seguro.
Pedro Hernández,
— Fiscalía General de la República El Salvador (@FGR_SV) May 25, 2023
Presidente de Alianza FC
Edwin Abarca Ventura, Gerente de Seguridad de Alianza FC
Zoila Córdova, Gerente Financiera de Alianza FC
Reynaldo Avelar Contreras, Gerente General de EDESSA
Samuel García Montano,
Encargado de las llaves del Estadio pic.twitter.com/cxYs5SW4Ou
La sobreventa generó una avalancha humana que puso en riesgo la seguridad de los asistentes al clásico entre los clubes deportivos Alianza FC y FAS por los cuartos de final de la liga local. Unas 4,000 personas se habían quedado fuera del estadio.
Luego de tener los boletos, los individuos comenzaron a exigir su ingreso a la instalación, hasta que optaron por derribar el portón, lo que provocó una estampida humana por la que hubo fallecidos y lesionados.