El Presidente de Argentina invitó a su par boliviano a continuar defendiendo juntos la democracia en América Latina.
Los presidentes de Argentina, Alberto Fernández, y de Bolivia, Luis Arce, condenaron el envío de pertrechos bélicos a esta nación por el expresidente Mauricio Macri tras el golpe de Estado en 2019, y ratificaron los lazos de amistad entre ambas naciones y la voluntad de continuar trabajando juntos para defender la democracia en América Latina.
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Fernández y Arce sostuvieron este domingo en la noche un encuentro por videoconferencia para presentar la película “Juana Azurduy. Guerrillera de la Patria Grande”, ocasión en que abordaron el envío de material bélico por Macri al Gobierno de facto de Jeanine Áñez, instalado tras el golpe de Estado en Bolivia en 2019.
Respecto a este suceso, Fernández manifestó que se siente avergonzado porque “la Argentina de aquellos días no se portó bien con los bolivianos”, en concreto “el Gobierno argentino de entonces”.
Agradecemos al pueblo y al gobierno de Argentina por el decidido apoyo que brindaron al pueblo boliviano durante el golpe de estado de 2019. La hermandad entre #Argentina y #Bolivia hoy está más vigente que nunca, trabajando unidos en la construcción de la #PatriaGrande.
— Luis Arce Catacora (Lucho Arce) (@LuchoXBolivia) July 12, 2021
Al mismo tiempo, expresó tranquilidad por el hecho de que el Gobierno que preside, junto con México, contribuyó a las gestiones para que salieran del país el expresidente Evo Morales, el exvicepresidente Álvaro García Linera y “tantos compañeros perseguidos en Bolivia”, dijo.
Por su parte, Arce le trasmitió que “no tenían por qué sentirse avergonzados”, pues “el Gobierno del pueblo argentino se ha portado siempre bien con nosotros, los bolivianos”. Además, le agradeció a su homólogo argentino por todo lo que hicieron para proteger la vida de Evo Morales.
Sobre el envío de pertrechos bélicos empleados en la represión posterior al golpe de Estado, Arce dijo que “hay instancias legales que seguramente van a tomar cartas en el asunto”. Agregó que ese tipo de colaboración “no se debería dar jamás a ningún Gobierno golpista, por ningún Gobierno”.
Acerca de este incidente, el embajador de Bolivia en Argentina, Jorge Ramiro Tapia, declaró este lunes que se ha corroborado en los archivos el ingreso de una nota junto a los materiales bélicos que el gobierno de Macri envió en 2019 a Bolivia, y expresó que el pueblo boliviano no quiere “ni olvido ni perdón, sino justicia”.
�� #MañanaSylvestre | ����️ "Corroboramos que hay un ingreso de la nota con los materiales bélicos que ingresaron al país", Jorge Ramiro Tapia a @Gatosylvestre �� https://t.co/ir13n1z8sN pic.twitter.com/7e0fnzVX46
— Radio 10 - AM 710 (@Radio10) July 12, 2021
Fernández también aseveró en la videoconferencia que los pueblos argentino y boliviano son “hermanos indisolublemente unidos, a los que nada puede separar”, e instó a los dos Gobiernos a “seguir trabajando unidos en esta América Latina donde la democracia tantas veces es asediada, maltratada”.
La videoconferencia entre los jefes de Estado se produjo en el marco del día de la amistad entre Argentina y Bolivia, cuando en la televisión pública de ambos países se presentó el filme “Juana Azurduy. Guerrillera de la Patria Grande”, del cineasta boliviano Jorge Sanjinés.
Juana Azurduy fue una mujer enorme que defendió el Alto Perú con valentía. Su lucha fue clave para la independencia.
— Alberto Fernández (@alferdez) July 12, 2021
El lazo que une al pueblo argentino y al boliviano data de aquel tiempo. Conmemoramos el nacimiento de una gran heroína que nos invita a proteger esta hermandad. pic.twitter.com/L5IukX16yA
Azurduy nació en el departamento de Potosí, Alto Perú, el 12 de julio de 1780, y tuvo una significativa participación en la gesta independentista de Argentina y Bolivia. Fernández dijo sobre ella que llevó “a toda su familia a la lucha por la liberación americana”, mientras que Arce la calificó de “valerosa y digna mujer que nos enseñó el camino de la libertad de los pueblos”.
En reconocimiento a su entrega, coraje y valentía, fue ascendida con carácter postmórtem en 2009 a mariscal del Ejército boliviano y a generala del Ejército argentino.