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Uruguay ahorró un aproximado de ocho millones de dólares en generación de electricidad con solo adelantar una hora durante el verano, según la Administración Nacional de Usinas y Transmisiones Eléctricas (UTE).
El horario de verano, que comenzó el primer domingo de octubre (2013) y terminará a las 02:00 horas del segundo domingo de marzo (día 9), significó un ahorro de energía estimado en un uno por ciento.
Ese mismo porcentaje se ha mantenido estable durante los últimos 10 años.
La UTE evaluó el beneficio energético, económico y ambiental de la medida y constató un ahorro de energía en el período de aproximadamente 32 mil 300 MWh.
La reducción de emisiones de dos mil 669 toneladas de anhídrido carbónico durante el verano significó una tonelada de monóxido de carbono, 10,4 toneladas de óxido de nitrógeno y 52 toneladas de dióxido de azufre menos.
El factor de emisiones de CO2 fue calculado a partir de la metodología que Naciones Unidas aplica a proyectos de eficiencia energética.
Uruguay adelantó este 6 de octubre una hora en su reloj con el fin de optimizar el ahorro energético, medida que se mantendrá hasta marzo de 2014, según la estatal empresa eléctrica UTE.
De acuerdo al decreto gubernamental del año 2006, los relojes de los uruguayos se adelantaron en 60 minutos. Así, a partir de las 02.00 horas del domingo los relojes habrán de modificarse para marcar la hora 03.00, dos horas menos que la hora GMT.
El adelanto de la hora en Uruguay comenzó a aplicarse en 2006 tras un decreto del presidente Tabaré Vázquez (2005-2010) que mantuvo vigente el actual mandatario, José Mujica, ambos de la coalición de izquierda Frente Amplio.
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