Medios estadounidenses informaron este martes la muerte de al menos 35 personas debido a los fuertes tornados, tormentas y granizos de gran tamaño que han azotado seis estados, mientras millones de residentes del sur y este de Estados Unidos se preparan para las peores condiciones climáticas.
Entre los estados afectados se encuentran Misisipi, Alabama y Tennessee (sur), donde este lunes murieron al menos 17 personas y en Arkansas (centro-suroeste), Iowa (centro-oeste) y Oklahoma (centro-sur) fallecieron otras 18 personas el pasado domingo.
Los reportes del Servicio Nacional de Meteorología dijeron este martes que “se esperan tormentas eléctricas severas en el sur de Mississippi, oeste de Alabama y este de Luisiana”.
Los gobernadores de Alabama y Georgia declararon el estado de emergencia en sus jurisdicciones.
El tornado que arrasó Louisville, Mississippi, fue, de acuerdo con los primeros informes de meteorólogos, de categoría EF4. Con 265-320 km/h haría de este tornado uno de los más intensos que afectó a Estados Unidos este año.
Días atrás, el Servicio Meteorológico advirtió que numerosos tornados podrían sacudir la región centro y sur del país, con la presencia de intensas lluvias, granizo y fuertes vientos.
Las autoridades competentes en la materia emitieron una señal de alerta para las regiones afectadas y recomendaron a sus habitantes resguardarse en refugios anti-tornados.