Tormenta de nieve no da tregua en EE.UU.

Una tormenta invernal con fuerte caída de nieve, que se desplazaba hacia el noreste, paralizó el viernes al este de Estados Unidos (EE.UU). El fenómeno meteorológico dejó entre 16 y 18 muertos, según la prensa local, también afectó el traslado de millones de personas.

Una capa de nieve, que en algunos lugares alcanzó los 60 centímetros de espesor, recubrió las regiones este y sur del país, mientras que en Washington (capital) el Gobierno central suspendió sus labores.

La prensa estadounidense cuenta entre 16 y 18 fallecidos, la mayoría en accidentes de transito. Una mujer embarazada murió tras haber sido herida por un quita-nieves, y su bebé fue salvado por cesárea aunque permanece en estado grave. Un hombre, internado en un psiquiátrico de Washington fue encontrado muerto en la nieve, según el alcalde de la capital, Vincent C. Gray.

El Servicio Nacional de Meteorología (NWS) advirtió que la tormenta se debilitaba sobre la costa este pero que "aportaría un clima muy invernal al noreste", especialmente en la región de los Apalaches y de Nueva Inglaterra, cerca de la frontera con Canadá.

Sin embargo, para este sábado se esperan nuevas nevadas y severas condiciones invernales sobre la costa este.

Retrasos y afectaciones

Este jueves las condiciones climáticas han llevado a la cancelación de unos seis mil 850 vuelos desde o hacia EE.UU., mientras que unos tres mil 800 fueron reprogramados.

Los retrasos y anulaciones de vuelos deberán continuar durante varios días. Las aerolíneas intentan solucionar la situación de una gran cantidad de pasajeros varados en los aeropuertos.

Asimismo, según el Departamento de Energía, unos 800 mil hogares o empresas se vieron privados de electricidad la tarde del jueves en 11 estados de las regiones sur y este, de los cuales 340 mil fueron en Carolina del Norte y Sur.

Según informaciones del Pentágono, más de dos mil 300 militares de la Guardia Nacional fueron desplegados el jueves en siete estados -desde Georgia a Delaware- para ayudar a los servicios de emergencia.

La circulación vehicular fue extremadamente difícil por la cantidad de nieve acumulada, de más de 30 centímetros. Algunas personas incluso sacaron a relucir sus esquíes.

Las escuelas no dictarán clases este viernes. Las puertas de las oficinas públicas permanecieron cerradas el jueves y circularon pocos ómnibus.