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Venezuela es un país de paz, así se ratificó en la segunda vuelta de diálogo entre Gobierno y oposición que se realizó este martes en la sede de la vicepresidencia del país. Ambas partes acordaron unirse en iniciativas que mitiguen la violencia golpista que ha dejado 41 víctimas fatales desde el pasado 12 de febrero.
El vicepresidente ejecutivo, Jorge Arreaza, detalló que con la ampliación de la Comisión de la Verdad se evaluarán los hechos violentos promovidos por la extrema derecha, que con fines de derrocamiento han ocasionado también centenares de heridos y pérdidas multimillonarias en el patrimonio nacional. La Comisión inicialmente tenía funciones parlamentarias, pero ahora se incluirán diversos sectores.
"La verdad es el camino para la justicia y para la paz", dijo Arreaza, quien además instó nuevamente a la autodenominada Mesa de la Unidad Democrática (MUD) de la oposición a unirse a la Conferencia Nacional por la Paz, en la que podrán exponer sugerencias en materia económica y de seguridad.
Asimismo, aseguró que el avance del diálogo por la paz, que contó con el acompañamiento de cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), es una buena noticia para el país.
El segundo al mando de la nación también agradeció la constancia y asesoría de los ministros de Relaciones Exteriores de Brasil, Luis Figueiredo; de Colombia, María Ángela Holguín; y de Ecuador, Ricardo Patiño y del nuncio apostólico.
Por otra parte, el secretario general de la MUD, Ramón Guillermo Aveledo, aseguró que el grupo político que representa está de acuerdo con el Plan de Pacificación impulsado por el Gobierno revolucionario.
“Vamos a estudiar ese plan y hacer nuestros aportes con nuestros expertos en la materia (...) estamos dispuestos a coordinar y participar en los planes de promoción de la paz”, añadió. En ese contexto, crearán mesas de trabajo para avanzar en el estudio de estrategias por la paz y en la toma de decisiones al respecto.
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