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El presidente de México, Enrique Peña Nieto, emprenderá este martes una gira de trabajo por el estado de Michoacán (oeste), entidad que durante las últimas semanas ha sido escenario de violentos enfrentamientos entre grupos de autodefensas armados y personas asociadas al cartel de Los Caballeros Templarios, el cual se moviliza en esa región.
Se trata de la primera visita del Mandatario a ese estado desde el despliegue de las fuerzas federales y militares, en enero pasado, cuyo objetivo es asumir el control de la seguridad, además de organizar y dirigir a los grupos de autodefensas.
Un comunicado oficial reseñó que Peña Nieto tiene previsto anunciar la reconstrucción de la carretera Playa Azul-Manzanillo, además de nuevas estrategias en materia de seguridad para la entidad federativa.
El comisionado para la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán, Alfredo Castillo, señaló que Peña Nieto estará acompañado por todo su gabinete y explicará también cómo se irán desplegando los apoyos y programas sociales destinados a restablecer el tejido social en ese estado.
De igual manera, el funcionario indicó que el jefe de Estado dará a conocer metas perfectamente definidas y sustentadas en torno al futuro de la entidad.
Por su parte, el gobernador local, Fausto Vallejo, manifestó que el Presidente llegará “con las manos llenas para hacerle justicia a Michoacán”.
Peña Nieto viaja a Lázaro Cárdenas, Michoacán, región que fue afectada recientemente por las lluvias derivadas por el paso de la tormenta tropical "Manuel", el mismo fenómeno que afecto en su mayoría al estado de Guerrero.
Los enfrentamientos entre Los Caballeros Templarios y las autodefensas crearon un clima de inestabilidad en 27 municipios. Luego de un fin de semana en el que se registraron quemas de vehículos e inmuebles, los gobiernos federal y local firmaron un acuerdo para apoyar al estado.
El ministro del Interior, Miguel Ángel Osorio, ha negado que la intervención de las fuerzas federales tenga un objetivo político de detener a los funcionarios y alcaldes que pudieran estar vinculados al crimen organizado, como sucedió durante el Gobierno de Felipe Calderón (2006-2012).
En mayo de 2009, la Fiscalía federal arrestó a 35 funcionarios de Michoacán por presuntos vínculos con el crimen organizado, entre ellos doce alcaldes, ocho altos funcionarios estatales, un juez, doce policías y dos exdirectores de seguridad pública.
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