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El actual representante de la Cámara y defensor de los derechos humanos, Iván Cepeda, aseguró el jueves que de consolidarse un 33 por ciento del Senado para la extrema derecha colombiana, se dificultará el desarrollo del proceso de paz que pondría fin al conflicto armado que enfrenta desde hace más de 50 años.
“Una conformación de la tercera parte del senado por la extrema derecha podría generar una atracción de las bancadas de Santos para que se conforme una nueva mayoría”, explicó y detalló que la premisa de los derechistas colombianos es refundar la patria para volcarla al paramilitarismo.
El parlamentario, en uno de sus libros, acusó al expresidente Álvaro Uribe de fundar un grupo paramilitar en una de sus fincas, de acumular tierras y de proteger a un general de la Policía que está preso en Estados Unidos por narcotráfico.
El principal reto de los electores del sector progresista colombiano es evitar que las fuerzas de derecha, comandadas por Uribe, controlen los entes legislativos de la nación colombiana.
En los comicios parlamentarios del próximo domingo, 32,7 millones de colombianos son convocados a elegir a quienes llenarán 102 puestos en el Senado, 166 de la Cámara de Representantes y las cinco sillas del Parlamento Andino.
Los representantes electos ejercerán sus funciones desde julio próximo hasta el mismo mes del 2018. Más de 260 mil policías y militares resguardarán las elecciones legislativas, que se realizarán en 96.722 mesas de votación, de las cuales 1667 se distribuyen en el exterior de Colombia.
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