Alrededor de 150 mil personas aún se encuentran atrapadas en sus casas una semana después de las peores inundaciones por lluvias monzónicas en medio siglo en Cachemira (India), específicamente en la ciudad Srinagar, capital del estado de Jammu y Cachemira. Las aguas estancadas aumentan los temores de un brote de enfermedades.
Funcionarios estatales dijeron que no tenían suficientes bombas para drenar el agua que inundó Srinagar, una ciudad de un millón de habitantes rodeada por montañas. Varias bombas estaban bajo el agua y se habían ordenado otras 30 a Nueva Delhi, capital de India.
Hombres caminan en las calles inundadas de Srinagar
"El agua estancada es mucho más peligrosa que el agua que fluye", advirtió el director del Instituto de Ciencias Médicas Sher-i-Kashmir, Showkat Zargar, uno de los pocos hospitales que funcionan en la ciudad. "Hay muchos animales que han muerto. Esta es la mayor fuente de infección", agregó.
El Ejército indio y botes de civiles se desplazaban por las calles inundadas de Srinagar, para recoger a residentes y entregar agua, alimentos y medicamentos básicos a personas que optaron por acampar en los pisos superiores de sus viviendas.