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El fuerte temporal que azota a Israel, Jordania y el Líbano, obligó a las autoridades a cerrar las escuelas y carreteras como medida de prevención, así como los puertos marítimos y restringir el transporte público, estas dos últimas medidas fueron implementadas en Israel.
El servicio meteorológico israelí informó que en Jerusalén las fuertes nevadas han alcanzado, por el momento, 25 centímetros de nieve y preven que sea superada durante el día.
Ante esta situación los planteles educativos permanecerán cerrados hasta que las condiciones climáticas mejoren.
Las autopistas que conducen a Jerusalén fueron cerradas por algunas horas para poder retirar la nieve, al igual que en Jordania donde la mayoría de las carreteras se encuentran paralizadas.
La nevada ha sido tan grande que incluso se registró en el desierto de Néguev, (sur de Israel) y en la devastada región de Cisjordania la cual quedó cubierta de nieve.
El titular de Seguridad Pública de Israel, Yitzhak Aharonovitch, informó que los servicios de emergencia y rescate están preparados y pidió que los habitantes sigan las instrucciones que les den las autoridades.
"El principal objetivo para todos es salvar vidas y facilitar los servicios esenciales para los residentes de las áreas afectadas".
El servicio meteorológico de Líbano, informó que se han registrado fuertes granizadas en Beirut.
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