El jefe del Departamento de Cooperación Europea de la Cancillería de Rusia, Andréi Kelin, expresó que la queja impuesta por Estados Unidos (EE.UU.) que acusa a su país de haber interferido en los resultados de las elecciones norteamericanas son muestras de paranoia.
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"Las acusaciones de Occidente especialmente de EE.UU. de que Rusia interfirió en los resultados de las elecciones norteamericanas son un intento absurdo de jugar con la opinión electoral para ponerla a su favor", afirmó el representante de Exteriores ruso.
Asimismo, aprovechó para decir que no tiene la menor idea de cómo su país, Rusia, hubiera hecho para inmiscuirse en la campaña electoral de un país tan grande como EE.UU.
Estas declaraciones se dan después que el jefe de la bancada republicana en el Senado estadounidense, Mitch McConnell, dijera el pasado lunes que está de acuerdo con la investigación que lleva adelante la CIA con respecto a la supuesta intromisión de Rusia en las elecciones presidenciales que dieron como ganador a Donald Trump.
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