La premio Nobel de la Paz (1992), la líder guatemalteca Rigoberta Menchú, se refirió este lunes al racismo como una “enfermedad mental que socava la integridad del ser humano”.
En su intervención en la Primera Conferencia Mundial sobre los Pueblos Indígenas, la líder indígena hizo hincapié en fortalecer la participación de la comunidad de originarios de una forma legítima, plena, activa, positiva en los planes de trabajo, en los organismos de las Naciones Unidas y en las políticas públicas a nivel nacional.
La vocera destacó la importancia de pactar este lunes la Declaración de los pueblos indígenas y celebró los avances que han tenido como comunidad indígena, "ya tenemos luces, éxitos porque en este día, en esta magna conferencia se pactará la Declaración de los pueblos indígenas”.
Por otra parte, rindió un homenaje a “los miles y miles de comunidades indígenas que han perdido la vida desde que se inició la discusión por la lucha de sus derechos, en agosto de 1882".
"A partir de estos años han sufrido las comunidades gravísimas violaciones de los derechos humanos como genocidio, etnocidio, feticidio, femicidio, son conceptos que no se encuentran en las resoluciones pero es necesario dejar un precedente para que en esta asamblea se fortalezca la observación, fiscalización del cumplimiento de herramientas internacionales”, expresó.
EN CONTEXTO
La Primera Conferencia Mundial sobre los Pueblos Indígenas comenzó este lunes en la sede de la Organización de Naciones Unidas (ONU), en Nueva York (noreste de Estados Unidos), con el propósito de discutir las recomendaciones para la promoción y protección de los pueblos originarios.
Según datos de Naciones Unidas, existen en el planeta más de cinco mil diferentes grupos originarios, distribuidos en 90 países, representando más del cinco por ciento de la población mundial.
La ONU admite que se ha logrado poco progreso en la materialización de los derechos de los indígenas, quienes sufren pobreza, hambre, desplazamiento y represión.