Unos 52 sacerdotes colgaron los hábitos por delitos sexuales

Tras ser declarados culpables por delitos sexuales, más de cincuenta sacerdotes de Inglaterra y Gales fueron obligados a colgar los hábitos.

Para acabar con los actos inmorales dentro de la iglesia católica, en 2001 se nombró una comisión independiente, cuyo objetivo es "garantizar la protección de los menores y de los adultos vulnerables en el seno de la iglesia" católica en Inglaterra y en Gales, que ha presentado alrededor de 487 acusaciones de agresiones sexuales contra miembros del clero entre 2003 y 2012.

Además, 31 miembros del clero más fueron acusados de poseer imágenes indecentes de menores.

Danny Sullivan, presidente de la National Catholic Safeguarding Commission (NCSC), manifestó que "desde 2002, hemos informado automáticamente a la policía de cualquier acusación, ya sea sobre hechos pasados o actuales", aunque reconoció que muchos casos no pudieron registrarse, ya que las víctimas se niegan a aceptar los abusos.