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El rey Felipe VI anunció este lunes una serie de medidas que apuntan a los nuevos cambios que prometió en la toma de posesión, entre los que destacan la prohibición del trabajo en el sector privado por parte de todos los miembros de la familia real.
"Los miembros de la familia real solamente podrán desarrollar, con carácter de exclusividad, actividades de naturaleza institucional", informaron fuentes de la casa real española.
Ni los reyes Juan Carlos y Sofía ni la reina Letizia, ni sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, podrán tener un trabajo más allá de la actividad remunerada que desarrollan como representantes de la Corona española.
Medios españoles aseguran que esta medida es emprendida en respuesta al caso de corrupción en el que está imputada su hermana la infanta Cristina y en el que el que su cuñado tiene el papel protagonista.
Auditoria externa
Felipe VI decidió a partir del año que viene someter las cuentas de la Corona a la Intervención General del Estado, a modo de auditoría externa, una medida que otras casas reales europeas impusieron ya antes.
También prepara un código de conducta aplicable a la realeza y una regulación sobre los regalos que recibe la Familia Real.
Casos de corrupción
Iñaki Urdangarin está acusado de haberse apropiado de seis millones de euros de dinero público junto a su exsocio, cuando ambos estaban al frente de una organización supuestamente sin fines de lucro.
A Cristina, el juez le imputa dos delitos fiscales y uno de blanqueo de dinero, cometidos supuestamente al ayudar a su marido.
La infanta y Urdangarin está apartados de la agenda oficial de la casa real española desde finales de 2011.
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