Las leyes brasileñas prohíben a los policías realizar paros o huelgas.
El paro policial en el estado brasileño de Ceará, que realizan funcionarios de la policía militar por demandas salariales desde el pasado 19 de febrero, registra hasta el momento 170 muertos.
LEA TAMBIÉN :
La policía militar no ha llegado a ningún acuerdo con el Gobierno de Camilo Santana. Según información de las autoridades de Ceará, el pasado lunes se registraron 23 homicidios, los cuales incrementaron a 170 la cantidad de muertos desde el inicio del paro de la policía militar.
El reclamo de los policías manifestantes ocurre en el marco del carnaval, una las principales celebraciones del país.
En ciudades del interior del estado de Ceará, como Paracarú, las celebraciones carnestolendas fueron suspendidas debido a la falta de seguridad, ya que la policía militar es la responsable de patrullar las calles.
El gobernador del estado de Ceará, Camilo Santana, ha señalado que los funcionarios sospechosos de estar involucrados en las protestas han sido removidos de su cargo.
“La amnistía está fuera de discusión para los oficiales identificados como participantes en el motín: 167 oficiales de la policía militar sospechosos de ser parte del movimiento han sido destituidos de sus cargos y deberán devolver las armas, las esposas e insignias”, señaló Santana con respecto a la situación de violencia que se registra en Ceará.
Con motivo al incremento de muertos y las tensiones por las protestas de los funcionarios policiales, este miércoles, se conformó una comisión para atender la situación, la cual está integrada por representantes de los poderes Judicial, Legislativo y Ejecutivo.
La comisión tiene como primer objetivo, establecer vías de comunicación con los policías manifestantes para encontrar una solución en conjunto.
Nota oficial pic.twitter.com/sXNbcRd40o
— Governo do Ceará (@GovernoDoCeara) February 26, 2020
Durante el inicio del paro policial, el diputado por el Partido Democrático Laborista (PDT), Cid Gómez, fue herido por dos disparos luego de intentar ingresar en un cuartel tomado por los huelguistas.
En este sentido, el 20 de febrero el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, autorizó el envió de 2.500 militares para patrullar las calles de todo el estado de Ceará.
La policía civil en Brasil es la encargada de realizar investigaciones criminalisticas, mientras que la policía militar tiene como función resguardar el orden interno.