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Tras cinco años de hostilidades, por primera vez algunas localidades de Siria amanecen sin el sonido de los constantes ataques de bombardeos tras la entrada en vigencia del cese de hostilidades entre las fuerzas del Gobierno y la oposición.
Las regiones donde la lucha se detendrá como resultado a la aplicación del cese de hostilidades será probablemente la mayor parte de Damasco, incluyendo la Guta Oriental; la provincia de Deraa, en el sur de Siria, (aunque hay una presencia importante del Frente al Nusra en la zona); y el norte de las provincias de Homs y Hama, en el centro de ese país.
En Alepo se mantendrá el combate contra grupos terroristas en los barrios de Hamidiyah y Sayyed Ali, donde el EI y el Frente al Nusra mantiene una fuerte presencia. “Nosotros podemos ver sus banderas en todas partes”, dijo un soldado sirio a la cadena de comunicación RT.
Se trata de la primera vez, desde que se iniciaron los enfrentamientos en 2011, que en esa nación no se sienten los estruendos de las bombas.
Este hecho histórico es resultado del acuerdo promovido por Rusia y Estados Unidos, pacto que fue respaldado de manera unánime por el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
¿Dónde no aplicará?
Es previsible que los combates continúen en Daria, un feudo de las facciones terroristas, incluyendo el Frente al Nusra. Esta ciudad está localizada en la Guta Occidental, en la provincia de Damasco.
En el este de Homs, donde hay una presencia exclusiva del autodenominado Estado Islámico (EI), las operaciones continuarán, en especial en la antigua ciudad de Palmira.
De igual manera, en las provincias de Deir Ezzor y Raqqa, en poder del EI, donde las hostilidades no se producirá. Tampoco se aplicará en la provincia norteña de Idleb, el principal bastión del Frente al Nusra en Siria.
En la provincia de Quneitra, junto a la frontera del Golán, no se implementará el acuerdo debido a la presencia del Frente al Nusra en la región.
