• Telesur Señal en Vivo
  • Telesur Solo Audio
  • facebook
  • twitter
Los diputados de la Cámara de Diputados votaron por motivos familiares y de otra índole, pero ninguno se refirió a las verdaderas causas del juicio político.

Los diputados de la Cámara de Diputados votaron por motivos familiares y de otra índole, pero ninguno se refirió a las verdaderas causas del juicio político. | Foto: Archivo Telesur

Publicado 18 abril 2016



Blogs


Algunos parlamentarios dedicaron su voto por el 'sí' al juicio político contra Dilma, al Coronel Carlos Brihante, jefe de uno de los centros de tortura durante la dictadura militar en Brasil. 

 

La Cámara de Diputados de Brasil votó este domingo a favor de llevar al Senado la solicitud de juicio político contra la presidenta de ese país, Dilma Rousseff. La inmensa mayoría de los 513 citaron motivaciones personales para abrir el proceso, pero olvidaron los motivos que estaban en discusión.

Se habló de Dios como argumento para apelar por un sí al juicio político o impeachment, también de la familia, de la democracia y del comunismo, pero la verdad es que que ninguno de los discursos asomó un ápice de las causas para el juicio político contra la mandataria.

>> 36 caras del golpe: Los delitos de diputados pro impeachment en Brasil 

Un resumen de la jornada elaborado por el diario El Mundo señala que la sesión, que se desarrolló entre tumultos, gritos y hasta empujones entre los políticos, estuvo cargada de declaraciones y posiciones de legisladores emocionados que olvidaron los argumentos jurídicos sobre las acusaciones.

Centenares de diputados dijeron votar en nombre de su familia, de su estado, de su gremio, de Dios, e incluso uno fue capaz de decir que participaba del proceso por la tía que lo cuidó cuando niño.

>>Pueblo promete combatir el golpe de Estado desde las calles de Brasil 

También, "se mezclaron temas políticos que nada tenía que ver con el tema sobre la mesa de debate", refiere El Mundo.

Frases como "Por la familia cuadrangular”, “por mi hijo que cumple años”, “por los evangélicos” y por decenas de motivos familiares y de otra índole, fueron pronunciadas por lo detractores de Rousseff para ceder su voto y darle continuidad a la medida que ha sido denominada como un golpe de Estado.

La periodista y analista de El País, María Martín, refirió que las maniobras fiscales, motivo real del proceso, quedaron atrás porque muchos de los legisladores "exprimieron hasta el último segundo de gloria", durante su oportunidad de decidir si votaban sí o no al impeachment.

No obstante, el momento cumbre lo marcó el diputado del Partido Social Cristiano (PSC), Jair Bolsonaro, quien dedicó con orgullo su voto al Coronel Carlos Alberto Brihante Ustra, jefe de uno de los centros donde se realizaron torturas durante la dictadura militar en este país de América del Sur.

El dato
Durante la ronda hubo cánticos y  un cañón lanzando confetis.

Tanto Jair como su hijo, Eduardo Bolsonaro, citaron a los militares de 64  en sus discursos de diez segundos en la Cámara.

"Fue raro escuchar un voto dedicado a la calidad de la educación, a la salud, a los desempleados o a las minorías", reseñó Martín, resaltando que algunos de los parlamentarios fueron más abstractos y votaron por el sí para 'reencontrarse con la historia'.

En este mismo orden, los diputados expresaron su defensa del proceso de destitución para evitar que "los niños aprendan sexo en las escuelas" y "para acabar con la Central Única de los Trabajadores y sus marginales” y “para que se les deje de dar dinero a los desocupados.

 

Tras validar los argumentos que dieron entrada al impeachment en el Parlamento, se dio alas a un proceso que según el abogado del Gobierno, José Eduardo Cardozo, fue motivado por la venganza del presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, a quien no se le ayudó durante un proceso por presunta corrupción.

Cunha es sospechoso de haber recibido alrededor de 13 millones de euros en sobornos depositados en varias cuentas en Suiza.

Para el diario El Mundo resulta difícil que la población deposite la confianza en el juicio de una Cámara que cuenta con un 60 por ciento de sus 594 diputados acusados por algún tipo de proceso de corrupción.

Rousseff refirió recientemente que las acusaciones en su contra se tratan de un golpe mediante el cual se “quiere condenar a una inocente y salvar a los corruptos”.

En contexto 
Un año y tres meses después de iniciar su segundo mandato, Rousseff se encuentra punto de ser separada del cargo no solo por el proceso que arrancó dando cabida a las denuncias de los juristas, sino por una serie de maniobras de la oposición que incluyen una guerra mediática contra la presidenta. 
En la Cámara de Diputados debió discutirse los motivos para procesar a la mandataria, que es señalada por presuntamente haber maquillado las cuentas de 2014 y 2015 con el atraso de préstamos a bancos públicos, lo que su defensa ha negado en reiteradas ocasiones. 
Durante la jornada no se presentaron pruebas de los delitos ni argumentos sólidos, según refirieron medios locales. 

Comentarios
0
Comentarios
Nota sin comentarios.