Algunos parlamentarios dedicaron su voto por el 'sí' al juicio político contra Dilma, al Coronel Carlos Brihante, jefe de uno de los centros de tortura durante la dictadura militar en Brasil.
La Cámara de Diputados de Brasil votó este domingo a favor de llevar al Senado la solicitud de juicio político contra la presidenta de ese país, Dilma Rousseff. La inmensa mayoría de los 513 citaron motivaciones personales para abrir el proceso, pero olvidaron los motivos que estaban en discusión.
Se habló de Dios como argumento para apelar por un sí al juicio político o impeachment, también de la familia, de la democracia y del comunismo, pero la verdad es que que ninguno de los discursos asomó un ápice de las causas para el juicio político contra la mandataria.
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Un resumen de la jornada elaborado por el diario El Mundo señala que la sesión, que se desarrolló entre tumultos, gritos y hasta empujones entre los políticos, estuvo cargada de declaraciones y posiciones de legisladores emocionados que olvidaron los argumentos jurídicos sobre las acusaciones.
Centenares de diputados dijeron votar en nombre de su familia, de su estado, de su gremio, de Dios, e incluso uno fue capaz de decir que participaba del proceso por la tía que lo cuidó cuando niño.
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También, "se mezclaron temas políticos que nada tenía que ver con el tema sobre la mesa de debate", refiere El Mundo.
Frases como "Por la familia cuadrangular”, “por mi hijo que cumple años”, “por los evangélicos” y por decenas de motivos familiares y de otra índole, fueron pronunciadas por lo detractores de Rousseff para ceder su voto y darle continuidad a la medida que ha sido denominada como un golpe de Estado.
#ElMundoConDilma QUE COSAS:LAS ESPOSAS,LAS TIAS,LOS AMIGOS DE LOS DIPUTADOS BRASILEÑOS ESTAN X ENCIMA DE LA CONSTITUCIÓN, POBRE DISCURSO
— migdalia (@migdalialoreto) 18 de abril de 2016
La periodista y analista de El País, María Martín, refirió que las maniobras fiscales, motivo real del proceso, quedaron atrás porque muchos de los legisladores "exprimieron hasta el último segundo de gloria", durante su oportunidad de decidir si votaban sí o no al impeachment.
No obstante, el momento cumbre lo marcó el diputado del Partido Social Cristiano (PSC), Jair Bolsonaro, quien dedicó con orgullo su voto al Coronel Carlos Alberto Brihante Ustra, jefe de uno de los centros donde se realizaron torturas durante la dictadura militar en este país de América del Sur.
Tanto Jair como su hijo, Eduardo Bolsonaro, citaron a los militares de 64 en sus discursos de diez segundos en la Cámara.
¿No pueden los diputados de Brasil decir Sí o No sin dar su “mini” discurso?
— Cesar Salazar (@cesarslh) 18 de abril de 2016
"Fue raro escuchar un voto dedicado a la calidad de la educación, a la salud, a los desempleados o a las minorías", reseñó Martín, resaltando que algunos de los parlamentarios fueron más abstractos y votaron por el sí para 'reencontrarse con la historia'.
En este mismo orden, los diputados expresaron su defensa del proceso de destitución para evitar que "los niños aprendan sexo en las escuelas" y "para acabar con la Central Única de los Trabajadores y sus marginales” y “para que se les deje de dar dinero a los desocupados.
@AndyjudxUSA hay diputados muy graciosos en su discurso, tan graciosos que dan pena
— el maro (@elmarobue) 18 de abril de 2016
Tras validar los argumentos que dieron entrada al impeachment en el Parlamento, se dio alas a un proceso que según el abogado del Gobierno, José Eduardo Cardozo, fue motivado por la venganza del presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, a quien no se le ayudó durante un proceso por presunta corrupción.
Cunha es sospechoso de haber recibido alrededor de 13 millones de euros en sobornos depositados en varias cuentas en Suiza.
Hay diputados que dan un discurso de media hora para solo votar. Mucho shw poca seriedad. https://t.co/RiEhPgJFqS
— Nicanor Garcia (@ApacheCrewChief) 17 de abril de 2016
Para el diario El Mundo resulta difícil que la población deposite la confianza en el juicio de una Cámara que cuenta con un 60 por ciento de sus 594 diputados acusados por algún tipo de proceso de corrupción.
Rousseff refirió recientemente que las acusaciones en su contra se tratan de un golpe mediante el cual se “quiere condenar a una inocente y salvar a los corruptos”.
Un diputado vota el golpe contra Dilma porque "se enseña sexo en las escuelas" (sic)
— Diego Pietrafesa (@diegopietrafesa) 17 de abril de 2016