Tsipras anuncia nuevas medidas de protección social

​El recién posesionado gobierno de Alexis Tsipras ha comenzado a aplicar lo contenido en su programa de gobierno para proteger al pueblo. Desde el inicio de su mandato dejó en claro que adoptaría una línea destinada a proteger a los sectores más vulnerables de la población afectada por los anteriores gobiernos neoliberales. 

Entre las primeras medidas en ejecutar se encuentra la prohibición de desahucios de primeras viviendas con el fin de proteger a las familias trabajadoras que, debido al desempleo y la precariedad laboral generada por las recetas neoliberales, no pueden pagar los préstamos a los bancos.

La prohibición de desahucios de primeras viviendas es una de las medidas de la política social que había prometido tomar Alexis Tsipras antes de las elecciones.

La nueva propuesta de ley prevé que se congelen todos los desahucios de primeras viviendas cuyo valor no supere los 300.000 euros. Para que alguien pueda ser incluido en esta nueva normativa, su fortuna total no debe superar los 500.000 euros.

Estas medidas forman parte del programa inmediato del primer ministro griego para hacer frente a la crisis humanitaria. Igualmente anunció una subida progresiva del salario mínimo hasta los 751 euros y una paga de navidad a los jubilados que cobren menos de 700 euros de pensión. Además, volverán a sus puestos de trabajo las personas cuyos despidos violaron la leyes, como limpiadoras ministeriales, guardias escolares o funcionarios.

También ha anunciado un plan de reforma de las administraciones públicas con reducciones del gasto en seguridad, aviones o coches oficiales. Ha rechazado que quieran una extensión del rescate, sino un "crédito puente hasta concluir las negociaciones para un programa de crecimiento".

A causa de las políticas capitalistas, que han desatado altos índices de desempleo, precariedad laboral y una creciente pobreza, en Grecia son miles los trabajadores y trabajadoras que se ven amenazados de desahucio por parte de la banca privada.

De esta normativa que impulsa el Gobierno griego para congelar los desahucios, se beneficiarán principalmente los trabajadores con pocos ingresos, los parados, los padres de familia numerosa, y las personas con necesidades especiales.

La normativa prevé que las familias que tengan ingresos anuales de hasta 25.000 euros no tengan que pagar a sus prestamistas ninguna cantidad que supere el 10 por ciento de dichos ingresos.

En cuanto a las negociaciones, Tsipras ha destacado que han planteado un "plan realista" y que su táctica de negociación no defiende más interés que el del pueblo griego. "No queremos hacer peligrar ningún equilibrio en Europa. Queremos ayudar a restablecer el equilibrio", ha indicado.