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El Gobierno norteamericano anunció que planea imponer nuevas sanciones a Rusia en coordinación y alianza con la Unión Europea (UE), y los acusa de intensificar la crisis en Ucrania mediante un supuesto apoyo a los independentistas de las regiones de Donetsk y Lugansk, en el este ucraniano.
El Gobierno norteamericano anunció este domingo que planea imponer nuevas sanciones a Rusia en coordinación y alianza con la Unión Europea (UE), informó una fuente oficial.
En medio de una investigación para establecer responsabilidades sobre el avión malasio derribado en el este de Ucrania, Washington emprende una nueva ofensiva económica mientras culpa a los independentistas prorrusos de atacar el avión.
Ben Rhodes, asesor de Seguridad Nacional, declaró a un medio local que la Casa Blanca coordina las nuevas sanciones contra Rusia, las cuales podrían ser anunciadas esta semana. Indicó que las penalizaciones recaerán sobre los sectores energético, defensivo y financiero del gigante euroasiático.
Washington insiste en acusar a Rusia de intensificar la crisis en Ucrania mediante un supuesto apoyo a los independentistas de las regiones de Donetsk y Lugansk, en el este ucraniano.
De su parte, funcionarios rusos han tachado esa actitud de poco ética y de flagrante violación de las reglas de investigación, desde el punto de vista de las leyes en la aviación civil.
"Formular conclusiones y acusar a alguien antes de que la investigación haya comenzado es una ficción total, un analfabetismo, una ignorancia incomprensible de las reglas y leyes", sostuvo días atrás el presidente de la comisión del Consejo Social de la Aviación Civil de Rusia, Oleg Smirnov.
En lo que respecta a la UE, el bloque de 28 naciones ha endurecido su postura ante Rusia desde la semana pasada, luego del derribo del avión de pasajeros malasio.
Después de una discusión que se prolongó desde el pasado jueves hasta la madrugada del viernes, los embajadores pidieron a la Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la UE, que redacte un texto legal que establece las sanciones económicas del bloque a la espera de un posible acuerdo que se concretaría la semana próxima.
Entre las principales medidas sugeridas por la Comisión están el cierre de los mercados de capital de la UE a bancos rusos controlados por el Estado, un embargo de ventas de armas a Moscú y restricciones en el suministro de energía y tecnologías de uso doble (civil y militar).
