Cualquiera pensaría que cocinar para el jefe mundial de la Iglesia católica es una tarea angustiante, no obstante, el chef mexicano, José Ibarra, se tomó con calma el cuidado de las comidas del papa durante la visita de este a Ciudad de México.
De hecho, la mayor preocupación del propietario de Don Sazón, el mejor restaurante brasileño en la colonia Escandón, en México, era la digestión del papa que ya tiene 79 años.
“Hubo algunas restricciones, pero únicamente restricciones por su edad”, contó Ibarra a teleSUR.
“Nada picante, ni nada que pudiese irritarlo; y trabajar con los ingredientes más sanos y frescos posible. El agua era de Roma, pero eso fue lo único”.
Ibarra y su equipo tenían la tarea de cocinar tres comidas al día para el papa argentino en la Nunciatura Apostólica de Ciudad de México, que es una misión diplomática de la Santa Sede, donde el papa se quedó durante su visita.
Después de cocinar para el papa Benedicto cuando el expontífice visitó México en 2012, el chef Ibarra ya consiguió el Santo Grial.
“Cualquiera pensaría que le vas a cocinar lo mejor al papa, algo bastante extravagante, pero en realidad es algo bastante simple. Este papa en particular es muy sencillo, noble; si fuese muy extravagante, sería algo negativo”, señaló el cocinero.
Es por ello que Ibarra se fue por lo sencillo.
“El desayuno fue bastante simple, al estilo americano. Pan, pan dulce, café, té, queso, mermelada”.
“Porciones pequeñas, comida ligera. Tienes que cuidar la digestión de una persona de 80 años”, sostuvo Ibarra.
¿El pontífice fue un crítico difícil o elogió de forma entusiasta al chef? “Dijo que todo estuvo muy bien y nos agradeció por todo”, afirmó Ibarra.
El papa Francisco se acercó a hablar con el equipo y les dio su bendición.
“El momento más memorable fue cuando vino a vernos, cuando nos dedicó unos momentos y pude intercambiar algunas palabras con él. Eso fue increíble”, aseguró el chef.
Recibo bendición y consejo , muy feliz de ser parte de su visita
Posted by Joe Ibarra on lunes, 15 de febrero de 2016
El propio Ibarra es católico (México es el segundo país con más católicos en el mundo después de Brasil), pero piensa que, aún si no lo fuese, la experiencia todavía sería muy significativa.
“Creo que, incluso para quienes no son católicos, es algo muy especial. El papa es un líder completamente diferente a los otros. Es un poder espiritual mayor que otros jefes de Estado”, afirmó. “Estoy muy agradecido por esta oportunidad”.
No obstante, Ibarra no piensa colgar carteles en su restaurante para jactarse de su clientela sagrada.
“La verdad es que no combina con el estilo, mi restaurante es más bien para fiestas”, afirmó el chef.