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Las primeras revelaciones de una investigación interna confirmaron que agentes de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA, por su sigla en inglés) vigilaban en secreto las actividades electrónicas de varios diputados del Senado.
El director de la CIA, John Brennan, ratificó que durante largo tiempo estuvieron vigilando a los responsables de la preparación del informe sobre las prácticas de las torturas de la institución. En marzo, la senadora demócrata, Dianne Feinstein, denunció que funcionarios de la agencia habían registrado su computadora y borraron ciertos archivos clave pertenecientes al documento.
Como Brennan no tenía pruebas de aquella acusación, negó que fuera cierta y llamó al centro de investigaciones para recabar. En efecto, las revelaciones de la investigación interna demostraron que se puso en marcha un análisis adicional destinado a averiguar las formas concretas de vigilancia clandestina.
Este jueves, el director de la agencia pidió disculpas a los senadores por "aquellas acciones de la CIA" a través de un comunicado. Las revelaciones serán analizadas por la junta disciplinaria para determinar medidas de prevención de ese tipo de infracciones en el futuro y penalizarlas.
El equipo de investigación aún indaga si los archivos de la senadora sobre las torturas fueron borrados ilegalmente por la CIA. Si se confirma este delito, el Departamento de Justicia podría iniciar un caso penal contra el organismo de inteligencia. El famoso expolítico estadounidense Ron Paul instó a "cerrar la CIA", pues hay pruebas fehacientes de robo de documentos y espionaje.
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